Inglaterra. – Un trágico caso que causó conmoción en la ciudadanía luego de que se diera a conocer que un hombre asesinara brutalmente a una mujer junto a su hija con un martillo en el bosque.

Se trata del caso de la mujer identificada como la doctora Lin Russell, sus dos hijas, Josie y Megan, y su perra, Lucy, quienes fueron brutalmente atacadas por un hombre con un martillo, en su camino a casa en el bosque,hacia Nonington Village, Kent, después de una gala de natación, dejando a la madre y a una hija sin vida.

Fueron obligadas a sentarse en el bosque, después, el agresor les vendó los ojos y ató a sus víctimas con toallas rotas y posteriormente, comenzó a golpearlas una por una.

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Josie, de nueve años, fue la única sobreviviente del brutal ataque, sin embargo, tuvo que volver a aprender a hablar luego de que cirujanos le insertaran una placa de metal en la cabeza para cubrir el área donde le habían destrozado el cráneo. Una parte de su tejido cerebral estaba tan dañado que tuvo que ser extirpado.

Posteriormente, el agresor fue identificado como Michael Stone, quien tenía antecedentes por robo y hurto, así como antecedentes por abuso de drogas y enfermedad mental, quien fue arrestado.

Cuando los detectives le preguntaron dónde estaba el día de los asesinatos, Stone respondió: No puedo recordar por dos razones. Uno, estaba muy drogado, y dos, fue hace mucho tiempo.

Durante el juicio, varios testigos testificaron contra Stone.

Uno sostuvo que el padrastro del acusado a menudo golpeaba al joven Michael con un martillo; varios presos (Barry Thompson, Damien Daley y Mark Jennings) afirmaron que Stone había confesado los asesinatos en distintas ocasiones; y una pareja, Sheree Batt y Lawrence Calder, alegaron que Stone había ido a su casa la mañana después de los asesinatos con ropa salpicada de sangre.

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