Israel respondió este miércoles con ataques aéreos contra varios objetivos de Hamás en la Franja de Gaza, después de que su sistema de defensa interceptara cinco proyectiles lanzados desde el territorio palestino hacia el sur israelí. La ofensiva se produjo horas después de que el Ejército israelí pusiera fin a una operación militar en el campo de refugiados de Yenín, en Cisjordania, que provocó la muerte de al menos doce palestinos, un centenar de heridos y un soldado israelí.

Según informó el Ejército israelí, los aviones de guerra atacaron un sitio subterráneo donde Hamás, el movimiento islamista que controla Gaza, fabricaba armas y otro donde producía materias primas para los cohetes. Israel acusó a Hamás de ser el responsable de lo que pasa en el enclave y le advirtió que “pagará por las violaciones de seguridad contra el Estado de Israel”.

El disparo de cohetes desde Gaza se registró en medio de un clima de tensión por la operación “Casa y Jardín” que el Ejército israelí realizó en el campo de refugiados de Yenín, considerado un “principal foco de terrorismo” por Israel. La incursión, que duró unas 48 horas, contó con efectivos terrestres y aviación por primera vez en casi dos décadas, lo que la convierte en la de mayor envergadura en Cisjordania ocupada desde la Segunda Intifada .

Al menos doce palestinos murieron por la operación, varios milicianos y civiles entre ellos, y la operación hirió a un centenar. Además, un soldado israelí murió. Un disparo alcanzó al sargento primero David Yehuda Yizhak, de 23 años, cuando aseguraba la retirada.El campo de refugiados quedó totalmente arrasado, sin suministro de luz ni agua, y unos 3.000 residentes tuvieron que abandonar sus casas.

El primer ministro palestino, Mohamad Shtayé, denunció la operación israelí y afirmó que “los que tienen derecho a defenderse son los palestinos”

“El Ejército israelí es un Ejército de ocupación, que ha asaltado un campo de refugiados, ha arrestado y matado a inocentes, y las tierras palestinas son tierras ocupadas”, dijo.

La Franja de Gaza ya vivió el pasado mayo una escalada bélica que enfrentó a Israel y a la Yihad Islámica -sin implicar a Hamás- y que dejó 35 muertos en el enclave y cuatro en Israel. El alto el fuego logrado entonces se ha mantenido frágil, con esporádicos lanzamientos de globos incendiarios y cohetes desde Gaza y ataques aéreos israelíes en represalia.

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