Roma.- La Fontana di Trevi, uno de los destinos turísticos más emblemáticos de Roma, cobrará dos euros a los turistas que deseen acercarse a ella. Esta medida, que ha generado un intenso debate, tiene como objetivo regular el flujo de visitantes y proteger este icónico monumento del barroco romano.

Alessandro Onorato, concejal de Turismo de Roma, justificó la decisión argumentando que la Fontana di Trevi se ha convertido en un punto de atracción masiva, con hasta 12,000 visitantes diarios, lo que ha generado problemas como aglomeraciones, vandalismo y falta de respeto al monumento. Para garantizar una experiencia única y serena a todos los visitantes, se implementará un punto de acceso y otro de salida, por lo que se tendrá que pagar para observarla de cerca y arrojar una moneda.

El costo de dos euros será destinado a contratar personal para informar y cuidar del monumento, así como a su conservación. Anualmente, los turistas arrojan alrededor de un millón de euros a la fuente, dinero que actualmente se dona a la organización humanitaria Cáritas.

La medida ha recibido opiniones encontradas. Los turistas extranjeros se muestran dispuestos a pagar por la experiencia, ya que actualmente es difícil admirar la fuente sin aglomeraciones. Por otro lado, turistas de otras regiones italianas consideran excesivo tener que pagar por visitar un lugar tan icónico de Roma.

Esta iniciativa forma parte de una estrategia más amplia de la ciudad de Roma para hacer frente al turismo masivo. El Ayuntamiento también está considerando reducir el número de alquileres turísticos y promover un turismo más sostenible y respetuoso con el patrimonio cultural y los residentes.

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