Italia otorgará a 600 mil inmigrantes ilegales el derecho a permanecer en el país, ya que han estado proporcionando trabajo esencial durante la crisis del Coronavirus.

Los migrantes no registrados han estado recogiendo cultivos y cuidando a los ancianos en todo el país, todo mientras corren el riesgo de ser arrestados si son atrapados por la policía.

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El Gobierno está otorgando permisos de seis meses a los migrantes que no les otorgarán el derecho a votar pero serán renovables.

Peppe Provenzano, ministro para el sur de Italia, dijo: “La comida en nuestra mesa proviene de estos campos. Ahora debemos entregar esos derechos que han sido negados a quienes trabajan en ellos «.

Los permisos fueron propuestos por la ministra de agricultura, Teresa Bellanova. La medida podría insertarse en un decreto temporal del gobierno con efecto inmediato, pero se votará en el parlamento después de 60 días, según The Times.

Bellanova dijo que obligar a los migrantes a esconderse podría significar que los brotes de la enfermedad no se controlen.

El Papa también pareció respaldar el mensaje de ayer cuando condenó la «dura explotación» de los trabajadores agrícolas migrantes en Italia.

Él dijo: «Que la crisis nos dé la oportunidad de hacer de la dignidad de la persona y del trabajo el centro de nuestra preocupación».

También hay ventajas prácticas para la nueva medida, ya que 100 mil recolectores rumanos que generalmente viajan a Italia cada año no pueden volar debido a las prohibiciones de viaje del Coronavirus.

La medida también legalizaría a alrededor de 100,000 inmigrantes ilegales que trabajan como cuidadores en el hogar.

El ex ministro del Interior, Matteo Salvini, ahora en oposición, afirmó que el gobierno estaba más preocupado por los derechos de los inmigrantes que de los italianos desempleados.

Bellanova amenazó con renunciar si la medida fue bloqueada.