El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha dado un paso significativo en la lucha contra la violencia armada en el país al anunciar la creación de la primera oficina de la Casa Blanca dedicada a prevenir este fenómeno que ha afectado a comunidades de todo el país.

Esta iniciativa se suma a las medidas adoptadas por su Gobierno para abordar un problema que ha dejado un rastro de tragedia en innumerables comunidades.

La nueva oficina estará encabezada por Stefanie Feldman, quien previamente dirigió las acciones de la Administración Biden relacionadas con la prevención de la violencia armada.

Además, contará con la valiosa experiencia y perspectiva de los expertos Greg Jackson y Rob Wilcox, quienes han experimentado personalmente el impacto de la violencia armada en sus propias vidas y familias.

El presidente Biden ha destacado la importancia de seguir abogando por medidas de sentido común en el Congreso, como la comprobación universal de antecedentes y la prohibición de armas de asalto y cargadores de alta capacidad.

Estas medidas son fundamentales para reducir la violencia armada y proteger a las comunidades de todo el país.

Joe Biden anuncia la creación de la primera oficina de la Casa Blanca para prevenir la violencia armada

Biden ha resaltado los logros de su Gobierno en la legislación de prevención de la violencia armada, calificándola como la más importante en casi 30 años.

Esta legislación ya está teniendo un impacto positivo al mantener las armas fuera del alcance de los menores de 21 años, otorgar al Departamento de Justicia mayores competencias para perseguir a los traficantes de armas de fuego y mejorar el acceso a servicios de salud mental.

Además, se está invirtiendo en intervenciones comunitarias para abordar las causas subyacentes de la violencia armada.

En un país donde, en lo que va de 2023, ha habido más de 500 tiroteos masivos, según datos del Archivo de Violencia Armada, la creación de esta oficina en la Casa Blanca es un paso fundamental para enfrentar este problema que ha afectado profundamente a la sociedad estadounidense.

El compromiso de Biden y su Gobierno en la lucha contra la violencia armada es evidente, y su enfoque en medidas de prevención y control de armas es un paso hacia un futuro más seguro para todos los ciudadanos.

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