El exvicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, quien actualmente se encuentra en la Embajada de México en Quito, ha confirmado que solicitará asilo diplomático a este país. Según su abogado, Eduardo Franco Loor, esta decisión se debe a que Glas considera que es un perseguido político y ha sufrido una «arremetida ilegal, arbitraria e inconstitucional» por parte de la Fiscalía de Ecuador.

Glas, quien ocupó el cargo de vicepresidente durante los Gobiernos de Rafael Correa y Lenín Moreno, se refugió en la embajada el pasado fin de semana, justo cuando se había solicitado su comparecencia ante la Fiscalía para una investigación en el caso llamado ‘Reconstrucción’.

Su abogado ha expresado su opinión de que la Fiscalía está llevando a cabo un acto de «revanchismo político y venganza», debido a que el movimiento político correísta Revolución Ciudadana, al que Glas pertenece, presentó un pedido de enjuiciamiento político contra la titular del Ministerio Público, Diana Salazar.

En vista de esta situación, Glas ha decidido solicitar el asilo diplomático, amparándose en la Convención de Asilo Diplomático de Caracas de 1954, con el fin de resguardar su integridad física, salud y vida. Su abogado confía en que México, un país que se rige por principios y tratados internacionales, concederá el asilo en los próximos días.

Según la Convención mencionada, es obligatorio que se le otorgue a Glas un salvoconducto que le permita viajar a México. El abogado también señaló que el presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, ha asegurado que él y su Gobierno no participarán en la persecución política.

Cabe mencionar que Glas estuvo encarcelado debido a una condena por asociación ilícita relacionada con el escándalo de sobornos de la constructora brasileña Odebrecht. Sin embargo, en agosto pasado, anunció que buscará revertir esta condena tras la anulación de las pruebas en su contra por parte del Supremo Tribunal Federal de Brasil.

En relación al caso ‘Reconstrucción’, que investiga la Fiscalía y está relacionado con posibles abusos de dinero público en beneficio de terceras personas, el abogado reafirmó que su cliente es un perseguido político. La Asamblea Nacional analizará mañana la solicitud presentada por Glas.