La tranquila ciudad de La Plata, Argentina, se vio alterada la noche del martes 21 de noviembre, cuando vecinos de la región de Ensenada decidieron tomar justicia por sus propias manos al saquear e incendiar la vivienda de Antonella Rocha, una joven de 22 años originaria de Bolivia. El caos se desató cuando los vecinos se dirigieron a la residencia de Rocha, ubicada en las calles de Pasaje Dolores e Ingrasia, exigiéndoles que les devuelvan el dinero tras caer en una estafa piramidal planeada por la joven. Antonella, visiblemente nerviosa, no pudo brindar respuestas a los reclamos y solo pidió más tiempo para efectuar los pagos. Ante la falta de soluciones, la tensión se elevó y los vecinos ingresaron a la casa a la fuerza, comenzando a sacar todas las pertenencias de Rocha a la calle.

Algunos aprovechan la situación para robar artículos del hogar y electrodomésticos. La situación se salió de control, lo que llevó a la intervención de la policía, quienes detuvieron a 15 personas y llevaron a Antonella para que responda por las acusaciones de fraude. En medio del desorden, se produjo un incendio en la vivienda y también se saqueó un local de motocicletas que se encontraba en la zona. Un policía resultó herido en los disturbios.

Idolo Ensenadense el que le robó el inodoro a Anto Rocha pic.twitter.com/QihMspZIKJ

— ꜰᴀᴄ 🇦🇹 (@southfac) November 22, 2023

La historia de la estafa

La historia de Antonella Rocha es la de una joven aparentemente exitosa que, en realidad, se encontró envuelta en una estafa piramidal. Convenció a sus vecinos para que invirtieran dinero con ella, prometiendo duplicar sus ganancias en menos de una semana. Al principio, cumplía con los pagos, pero a medida que pasaba el tiempo, Rocha no pudo continuar honrando sus compromisos. La deuda comenzó a acumularse hasta alcanzar la impresionante suma de 80 millones de pesos argentinos. En un intento de enmendar su situación, Antonella utilizó sus redes sociales para pedir disculpas a sus inversionistas y asegurarles que pagaría todas sus deudas.

Atribuyó la falta de pagos a un contratiempo personal y afirmó haber intentado resolver la situación por su cuenta, lo cual le llevó a bloquear las cuentas de sus asistentes involucrados en el negocio. Sin embargo, muchos dudan de la capacidad de Rocha para hacer frente a sus deudas y han acusado a las autoridades de protegerla. Las sospechas de una posible fuga aumentaron cuando Antonella borró sus perfiles principales en redes sociales.

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