Arizona.- La vicepresidenta Kamala Harris ha fijado su mirada en la frontera entre Estados Unidos y México, con el objetivo de mostrar a los votantes estadounidenses cómo puede mejorar el actual panorama migratorio, mientras que su contrincante republicano, Donald Trump, continúa resaltando la crisis migratoria que enfrenta el país.

Harris tiene planeado visitar Douglas, Arizona, una localidad fronteriza con menos de 17,000 habitantes. La candidata demócrata se compromete a luchar por un sistema de inmigración seguro, equitativo, organizado y humano, en contraste con la perspectiva divisiva del expresidente.

«Durante mucho tiempo, Kamala Harris ha defendido la necesidad de un sistema de inmigración que respete los derechos humanos y la seguridad de todos los involucrados. Su objetivo es implementar un plan de seguridad fronteriza bipartidista que represente un nuevo comienzo en este desafío», afirmó un asesor de campaña de Harris.

La llegada de Harris a la frontera sur se produce en un momento en que Estados Unidos ha experimentado un aumento récord en la detención de migrantes cruzando ilegalmente la frontera. Datos gubernamentales revelan que más de 7 millones de personas han sido detenidas durante el mandato de Harris y del presidente Joe Biden.

Kamala Harris visita la frontera en medio de tensiones

Por otro lado, Trump ha intensificado sus críticas a los inmigrantes en las últimas semanas, difundiendo información falsa sobre la comunidad haitiana en Ohio y acusando a los migrantes de cometer delitos y quitar puestos de trabajo a los estadounidenses. Esta retórica antiinmigrante ha calado entre un sector de la población, reflejándose en recientes encuestas.

Según un sondeo de Reuters/Ipsos, el 43% de los votantes muestra una mayor inclinación hacia Trump en temas relacionados con la inmigración. Por su parte, el 33% se inclina por Harris. Este escenario refleja la división existente en el electorado en torno a cómo abordar la compleja problemática migratoria del país.

Arizona, estado altamente disputado en las elecciones, se ha convertido en un foco de atención para ambos partidos. Sus altos índices de población latina y su posición estratégica en la frontera sur son clave en la atención. La lucha contra el tráfico de drogas, armas y personas cerca de la frontera continúa siendo una prioridad para las autoridades.

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