Kenia acusa al líder de una secta religiosa del asesinato de 191 niños
07/02/2024 - Hace 10 meses en InternacionalKenia acusa al líder de una secta religiosa del asesinato de 191 niños
El líder de una secta religiosa en Kenia, Paul McKenzie, fue acusado este miércoles por la Fiscalía del país del asesinato de 191 niños. Según las autoridades kenianas, McKenzie y otros líderes de la secta persuadieron a 430 personas a ayunar hasta la muerte, con la creencia de que así podrían reencontrarse con Jesucristo.
El macabro descubrimiento de los cadáveres de los niños tuvo lugar el año pasado en un bosque al sur del país. Las víctimas fueron encontradas enterradas en fosas comunes y tumbas en el bosque de Shakahola, ubicado en el condado costero de Kilifi.
Es el tercer juicio al que se enfrente la secta
La acusación presentada contra McKenzie incluye también a otros 29 presuntos socios suyos (acólitos), quienes niegan los cargos ante el Tribunal Superior de Malindi. Un abogado del líder de la secta, James Mouko, alegó ante el tribunal que el número de cargos resulta «opresivo y viola los derechos constitucionales del acusado»
Además, el abogado logró que uno de los acusado fuera considerado mentalmente inestable para responder ante los cargos.
Por otra parte, la Oficina del Director del Ministerio Público (ODPP por sus siglas en inglés) se opuso a la liberación de los sospechosos bajo fianza, ya que consideran que el caso es bastante complejo.
Esta es la tercera vez que las autoridades kenianas presentan cargos contra los presuntos responsables de la secta de Mackenzie, que ya se enfrentan a acusaciones de terrorismo y homicidio involuntario de al menos 283 personas.
El peor crimen en la historia de Kenia
La «masacre de Shakahola», como se ha denominado a este horrendo suceso, ha sido catalogada por las autoridades como «la peor brecha de seguridad en la historia del país». Los acusados fueron imputados a mediados de enero por cargos de terrorismo y asesinato.
Desde que las autoridades tuvieron conocimiento de los hechos, se han llevado a cabo excavaciones y exhumaciones en diferentes áreas del bosque, en busca de más víctimas. Hasta ahora, se han encontrado los cuerpos de 430 personas, pero las autoridades no descartan que haya más víctimas por descubrir.
Las autoridades kenianas continúan investigando este espeluznante caso, con el objetivo de llevar a todos los involucrados ante la justicia y garantizar que no se repitan tragedias similares en el futuro.
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