En una decisión unánime, los Veintisiete de la Unión Europea han acordado este lunes flexibilizar algunas disposiciones de las sanciones impuestas a varios regímenes, incluyendo Venezuela, Nicaragua y Túnez.

El objetivo es facilitar el acceso de las organizaciones humanitarias a la ayuda enviada en situaciones de crisis, alineándose con las directrices establecidas por las Naciones Unidas.

En consonancia con la resolución 2664 (2022) del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, los actores humanitarios reconocidos y las organizaciones certificadas como socios humanitarios de la Unión Europea ahora pueden realizar transacciones financieras con personas o entidades que estén en la lista de sancionados.

Esto es válido siempre y cuando el propósito sea asegurar la asistencia humanitaria en poblaciones vulnerables.

La Unión Europea flexibiliza sanciones para facilitar la ayuda humanitaria

La flexibilidad en estas medidas restrictivas será revisada periódicamente por los Veintisiete para evaluar su eficacia, y se tomarán medidas para ajustarlas en el futuro si es necesario.

Esta medida demuestra el compromiso de la Unión Europea en garantizar que las sanciones no se conviertan en obstáculos para la acción humanitaria.

La Unión Europea sostiene que esta adaptación en las medidas restrictivas, en línea con las directrices de las Naciones Unidas y otros socios internacionales, preserva la acción humanitaria ofrecida por actores «imparciales».

Además, la decisión envía un mensaje claro a los operadores humanitarios y actores económicos: la política de sanciones comunitarias no obstaculizará la prestación de asistencia humanitaria.

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