El viernes pasado, un matrimonio vivió una pesadilla en la zona sur de la ciudad de Córdoba, Argentina. Llegaron a la calle del domicilio para devolver una batería que le habían prestado cuando dos ladrones que aparecieron caminando los atacaron a punta de pistola.

Primero golpearon el parabrisas de su auto provocando una rajadura y luego uno de los delincuentes amenazó con matar a Omar. El cómplice dio la vuelta, abrió la puerta del acompañante y obligó a Laura a que se bajara. También le apuntó en la cabeza.

“Siento que cargan el arma y Omar grita ‘no, tengo dos hijos’. Y yo me bajé porque me estaban apuntando sino me bajaba lo iban a acribillar”, expresó la mujer con la voz quebrada.

Los ladrones huyeron en el Peugeot 308y la pareja se fue corriendo del lugar. Personal policial les tomó los datos y luego los trasladaron hasta la comisaría donde realizaron la denuncia. Pero a tres días del violento robo aún siguen sin respuestas. Desde la fiscalía solo les dicen que la causa está bajo secreto de sumario.

La historia de las personas afectadas

Laura trabaja como ama de casa dos veces por semana. Omar se quedó sin trabajo y hace cuatro meses realiza changas. Adentro del Peugeot 308 tenía todas las herramientas y ahora no puede cumplir con sus compromisos pendientes.

El matrimonio solo pide que les devuelvan el vehículo y las herramientas. Necesitan retomar con su vida para poder seguir pagando el alquiler y mantener a sus dos hijos (16 y 10 años).

Además, el auto lo usaban para llevar a su hijo menor a terapia. El nene tiene una discapacidad y debe continuar con sus tratamientos. Sumado que a ella le diagnosticaron cáncer de mama y esta semana debía iniciar con las sesiones de rayos.

“No sé cómo voy a empezar los rayos ahora, mi cuerpo no para de temblar”, manifestó desesperada Laura, quien remarcó que no quiere ayuda económica ni ninguna asistencia social, solo que les devuelvan sus pertenencias.

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