Un proyecto legislativo en Nueva York busca controlar la venta y distribución de detergentes en cápsulas y láminas que contienen alcohol polivinílico (PVA), un plástico con preocupaciones ambientales.

La iniciativa, liderada por el concejal James Gennaro, busca abordar la contaminación por microplásticos en los cuerpos de agua, estableciendo un posible precedente en Estados Unidos.

El PVA, presente en productos como cápsulas de detergente, ha sido identificado como una fuente significativa de microplásticos en el ambiente, con estudios que muestran su resistencia al tratamiento de aguas residuales convencionales.

La propuesta, llamada «Los Pods son Plástico», contempla multas por la venta o distribución de estos productos, con un posible inicio en enero de 2026, reflejando una creciente preocupación por los impactos ambientales de los detergentes que contienen PVA.

A pesar de la defensa de la industria sobre la seguridad de estos productos, críticos advierten sobre el potencial daño del PVA en los ecosistemas acuáticos y la salud humana, destacando la importancia de una regulación más estricta en materia de materiales biodegradables.

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