Los equipos de rescate de la región meridional china de Guangxi, donde se estrelló un avión con 132 pasajeros  a bordo, localizaron en las últimas horas restos humanos y supuestamente, un motor de avión.

Hasta ahora, los servicios de rescate han cubierto un área de aproximadamente 46 mil metros cuadrados durante los trabajos de búsqueda y rescate. Durante ello, no se ha encontrado señales de supervivientes.

El hallazgo del motor se suma al realizado el miércoles, donde se localizó una de las cajas negras del avión, específicamente la que registra las voces en la cabina. La cual se envió a Bejín para ser inspeccionada por expertos.

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«Una inspección inicial muestra que el exterior del receptor está gravemente dañado. La unidad de memoria también sufrió algunos daños, pero ha permanecido intacta», informó el  jefe de seguridad de la Administración de Aviación Civil de China (CACC), Zhu Tao.

De igual manera, se detalló que la descarga y análisis de los datos de la caja negra «tomará tiempo». Pero «proporcionará información importante acerca de la causa del accidente».

Debido al paso del tiempo y la violenta manera en que se impactó el avión, las esperanzas de encontrar supervivientes va en disminución.

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