En una manifestación sin precedentes, miles de personas marcharon hacia el Capitolio de Estados Unidos en rechazo al primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, quien se encontraba en Washington para solicitar apoyo en su lucha contra Hamás. La multitud, compuesta por manifestantes con banderas palestinas y pancartas, se congregó cerca del Capitolio, exigiendo un cese el fuego en Gaza tras nueve meses de guerra.

Durante la protesta, se registraron enfrentamientos con la policía, que tuvo que recurrir al uso de gas pimienta para dispersar a los manifestantes. Los carteles con mensajes de paz y llamados a la justicia también estuvieron presentes en la manifestación. Algunos citaban versículos bíblicos como «Busca la paz y persíguela», mientras que otros pedían el arresto de Netanyahu por ser un «criminal de guerra».

En un acto simbólico, varios manifestantes derribaron tres banderas estadounidenses y les prendieron fuego frente a la Union Station, un centro de transporte cercano al Capitolio, lo que provocó la intervención de la policía y el arresto de algunos participantes.

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Manifestantes pro-Palestina fueron filmados arrastrando y agrediendo a un oficial de policía frente a Union Station. Además, reemplazaron la bandera de EE. UU. con la bandera palestina y luego incendiaron la bandera estadounidense. pic.twitter.com/zK4Ehbxjou

— UHN Plus (@UHN_Plus) July 24, 2024

Netanyahu pide respaldo continuo de EU

Dentro del Capitolio, Netanyahu solicitó el respaldo continuo de Estados Unidos en la guerra contra Hamás, lo que generó aplausos por parte de los legisladores presentes. Sin embargo, sus declaraciones provocaron la crítica de los manifestantes que rechazaban el apoyo de Washington a la ofensiva militar en Gaza.

En medio de la tensión, el primer ministro israelí fue abucheado por legisladores en el recinto, quienes se solidarizaron con los manifestantes que lo denominaban como un «criminal de guerra». Las relaciones entre Estados Unidos e Israel se han visto deterioradas por la escalada de muertes civiles en Gaza, lo que ha llevado a la administración de Joe Biden a expresar su preocupación por la situación.

En un intento por justificar sus acciones, Netanyahu insistió en la necesidad de intensificar las operaciones militares en Gaza para liberar a los rehenes y derrotar a Hamás. Sin embargo, las críticas contra su gobierno y su gestión del conflicto continúan en aumento.

De esta manera, la visita de Netanyahu al Capitolio de Estados Unidos quedará marcada por las protestas y la resistencia de miles de personas que exigieron justicia y paz en medio de un conflicto que parece no tener fin. La presión sobre el gobierno israelí y su aliado estadounidense aumenta a medida que la comunidad internacional observa con preocupación los acontecimientos en Gaza.

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