Funcionarios de alto rango del Gobierno de Estados Unidos en Washington se apresuran a concretar un acuerdo que involucra ayuda militar a Ucrania y ajustes en las políticas fronterizas.

La Casa Blanca busca alcanzar un acuerdo en principio con negociadores clave del Senado antes de que el Congreso cierre sesiones por el fin de año, agregando urgencia a las discusiones.

El grupo negociador, encabezado por el Secretario de Seguridad Nacional Alejandro Mayorkas, ha estado trabajando arduamente para lograr avances significativos.

Aunque han habido progresos, aún no se han concretado los principios fundamentales del acuerdo.

Este esfuerzo se da en el contexto de la solicitud del presidente Joe Biden de 110 mil millones de dólares para Ucrania, Israel y otras prioridades de seguridad nacional, una propuesta que ha enfrentado reticencias de los republicanos, quienes buscan modificaciones en las políticas fronterizas a cambio de su apoyo.

Negociaciones urgentes en Washington por ayuda a Ucrania y políticas fronterizas

La tensión aumenta ante la inminente partida del Congreso, y las preocupaciones se centran en la posibilidad de que se retomen medidas estrictas en las políticas de migración y fronterizas, similares a las implementadas durante la presidencia de Donald Trump.

El debate sobre estas políticas ha generado manifestaciones y críticas, especialmente entre defensores de los migrantes y miembros del Partido Demócrata.

Las negociaciones también se han visto influenciadas por la reciente visita del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, quien buscó el respaldo de los legisladores estadounidenses.

La situación internacional y la amenaza planteada por la invasión rusa en Ucrania agregan un componente crucial a estas discusiones.

Entre las propuestas en debate, se encuentran planes para restringir las solicitudes de asilo en la frontera sur si el número total de cruces supera la capacidad diaria.

Además, se discuten medidas para detener a aquellos que soliciten asilo, incluidas familias con niños, posiblemente mediante sistemas de monitoreo electrónico.

Estas propuestas reflejan cierta similitud con políticas implementadas durante la administración Trump, aunque algunas fueron cuestionadas y anuladas en los tribunales.

Mientras los negociadores buscan un equilibrio entre las prioridades de seguridad y las preocupaciones humanitarias, el Senado enfrenta la presión de aprobar el paquete antes de que concluya el año.

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