La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) lanzaron la primera Norma Mundial sobre Escucha Segura dirigida a usuarios de videojuegos y deportes electrónicos. Este documento busca prevenir y reducir el riesgo de pérdida auditiva entre gamers y personas que utilizan de manera constante este tipo de plataformas de entretenimiento digital.

La nueva norma proporciona información clave, sugerencias prácticas y recursos específicos para que los jugadores cuiden su audición frente a la exposición prolongada a sonidos de alta intensidad. Además, el documento incluye recomendaciones adaptadas a distintos dispositivos, como consolas de videojuegos, computadoras personales, teléfonos móviles, dispositivos portátiles, auriculares y programas de videojuegos o ciberdeportes.

Entre las medidas sugeridas destaca el control de dosimetría del volumen, que mide la exposición acumulada al sonido durante las sesiones de juego, permitiendo un monitoreo constante. También se recomienda que los dispositivos incluyan mensajes informativos sobre el nivel de volumen y estimaciones sobre el tiempo restante antes de alcanzar límites sonoros inseguros.

Funciones recomendadas para dispositivos y videojuegos

La norma promueve incorporar un sistema de control de volumen intuitivo y fácil de ajustar, para que los jugadores gestionen el sonido de acuerdo con sus preferencias y necesidades. Asimismo, sugiere la integración de un “modo seguro” en auriculares, que regule automáticamente el volumen cuando el jugador cambie entre audífonos y altavoces.

Para los desarrolladores de videojuegos, se sugiere incluir advertencias claras sobre los riesgos auditivos derivados de sonidos fuertes y una exposición prolongada al audio de los juegos. También se recomienda implementar controles independientes para ajustar el volumen de efectos, música o diálogos, permitiendo personalizar cada elemento sonoro y silenciar algunos sin afectar el resto.

Además, la norma invita a adaptar la banda sonora, el estilo y el diseño del sonido de cada videojuego, integrando funciones de escucha segura directamente en el software. Se recomienda, por ejemplo, que los programas incluyan un modo seguro para auriculares, que detecte de manera automática si el usuario cambia entre audífonos y altavoces, ajustando el volumen sin necesidad de intervención manual.

Una estrategia global para proteger la salud auditiva

Esta norma forma parte de la iniciativa global “Escuchar sin riesgos”, impulsada por la OMS para mejorar los hábitos auditivos de la población, especialmente entre jóvenes. Su desarrollo contó con la colaboración de expertos de la OMS, gobiernos, empresas tecnológicas, consumidores y organizaciones de la sociedad civil, quienes aportaron diversas perspectivas y sugerencias.

Según la OMS, los gamers corren un riesgo elevado de desarrollar daños auditivos permanentes por la exposición constante a sonidos de alta intensidad mientras juegan o escuchan música. Este riesgo es aún mayor en niños y adolescentes, ya que tienen menor tolerancia al ruido y mayor interés en este tipo de entretenimiento.

El crecimiento acelerado de los videojuegos y los ciberdeportes, junto con la diversidad de dispositivos utilizados para acceder a estos contenidos, hace indispensable contar con normas claras de protección auditiva. La OMS calcula que alrededor de tres mil millones de personas disfrutan actualmente de videojuegos en computadoras, consolas y teléfonos móviles, la mayoría sin sistemas de protección auditiva incorporados.

Jérôme Salomon, subdirector general de la OMS, explicó que esta norma permite a gobiernos, fabricantes y la sociedad civil implementar medidas para proteger la audición de personas de todas las edades. Seizo Onoe, director de la Oficina de Normalización de la UIT, subrayó que contar con estas normas es esencial para evitar daños auditivos, especialmente entre los niños.

Esta nueva regulación representa un paso clave para garantizar que el entretenimiento digital no comprometa la salud auditiva de millones de usuarios en todo el mundo. La OMS y la UIT esperan que la norma motive a desarrolladores, fabricantes y autoridades a crear entornos de juego más seguros y conscientes de la salud auditiva.

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