París.- El asesinato de un adolescente por parte de la policía de París ha despertado una nueva ola de violentas protestas en el país. El joven asesinado era descendiente de una familia con orígenes en el norte de África, lo cual intensificó los reclamos por la presunta actuación racista de las instituciones francesas.

La movilización de los habitantes de la capital se dio durante la noche del pasado miércoles. De acuerdo con la información revelada por el presidente Emmanuel Macron en una junta de emergencia, más de 40 mil elementos de la policía francesa habrían sido desplegados para controlar las movilizaciones dentro del país.

Tan solo en París se estima que cinco mil de estas unidades se encuentran en activo y en constante enfrentamiento con los manifestantes. Las cantidades anunciadas por el gobierno son hasta cuatro veces de las desplegadas el miércoles, día en el que arrancaron las protestas.

“La respuesta del estado debe ser extremadamente firme”, expresó el ministro del Interior, Gerald Darmanin. Asimismo, se anunció el inicio de un estado de emergencia temporal en lo que se contienen las protestas.

El asesinato del adolescente, identificado como Nahel de 17 años, causó conmoción desde el pasado martes. Agentes de la policía francesa abrieron fuego en contra del joven quien había sido detenido por una infracción de tránsito.

Las autoridades francesas han respondido a las exigencias de la población dando inicio a una investigación alrededor de lo sucedido. Sin embargo, este proceso tomará un tiempo, por lo que no se ha ofrecido justicia a la muerte de un inocente, algo en lo que las protestas han sido vocales desde el primer día.

Se espera que una nueva movilización se presente durante la tarde y noche de este jueves.

Con información de Reuters.

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