El Departamento de Salud de Texas ha confirmado un aumento alarmante de casos de sarampión en el estado, con un total de 90 personas afectadas hasta ahora. Este brote, que se ha propagado por el oeste de Texas, es el más grave registrado en las últimas tres décadas. Las autoridades de salud indican que la mayoría de los casos son en niños y adolescentes de entre cinco y 17 años, con 51 contagios en este grupo. Además, se han reportado 26 casos en niños menores de cuatro años.

Es crucial destacar que la mayoría de los afectados no estaban vacunados, lo que ha facilitado la propagación de la enfermedad. El brote ha causado que al menos 16 personas necesiten hospitalización debido a complicaciones del sarampión. El condado de Gaines es el epicentro de este brote, donde las solicitudes de exenciones vacunatorias han aumentado considerablemente en los últimos años. En 2013, solo el 7.5% de los padres solicitaron una exención para vacunar a sus hijos en las escuelas infantiles del condado. Sin embargo, este porcentaje se incrementó al 17,5% en 2023.

Llamado urgente a la vacunación y medidas preventivas

Estas exenciones de vacunas han contribuido al incremento de los casos de sarampión en la región, lo que pone en peligro la salud pública. Por ello, las autoridades de salud de Texas hacen un llamado urgente a la población para que se vacune y tome las precauciones necesarias para evitar la propagación de enfermedades como el sarampión. La vacunación es fundamental para proteger la salud de la comunidad y prevenir futuros brotes de enfermedades contagiosas.

Es urgente que se tomen medidas inmediatas para controlar el brote de sarampión en Texas y evitar que esta situación empeore. La salud de la población, especialmente de los niños y adolescentes, está en riesgo. Es responsabilidad de todos actuar para protegerla.

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