El gobierno de Chengdu, China, ordenó el confinamiento de sus 21 millones de habitantes, lo anterior luego que se reportaran 900 casos de COVID-19 en 10 días.

Debido a ello, las personas temen que se repita lo ocurrido en otras ciudades durante el confinamiento por COVID-19; es decir, escasez de alimentos.

Tras el anuncio, los ciudadanos acudieron a los supermercados y los estantes quedaron vacíos. Mientras que en las calles  los automovilistas trataban de llegar a sus casas.

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Hasta ahora el gobierno local no ha dado a conocer cuándo terminará el confinamiento; pero señalaron que  entre el 1 y el 4 de septiembre, se realizarán pruebas masivas.

Política Cero Covid 

China ha confinado a millones de habitantes en diversas ciudades siguiendo la política de «Cero Covid «. Sin embargo, esto afecta no solo a su población, también a su  economía,  sin tener una influencia notable a nivel global.

Mientras que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha catalogado esta política para controlar los contagios de COVID-19 en China, como «insostenible».

«Cuando hablamos de la estrategia de cero covid, no creemos que sea sostenible teniendo en cuenta el comportamiento del virus hoy y lo que anticipamos para el futuro. Hemos discutido el asunto con expertos chinos. Y les hemos indicado que el manejo [covid cero] no será sostenible… Creo que un cambio sería bastante importante«, declaró Tedros Adhanom Ghebreyesus, director de la OMS.

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