Donald Trump anunció su intención de cambiar el nombre del Golfo de México por el de «Golfo de América» una vez asuma la presidencia de Estados Unidos. El mandatario electo destacó que este nuevo nombre tiene un lindo sonido.

«Le vamos a cambiar el nombre al Golfo de México por el Golfo de América, que tiene un lindo sonido. Es lo apropiado. Y México tiene que parar de dejar entrar a millones de personas a nuestro país«, dijo el próximo mandatario.

En una conferencia de prensa realizada en su residencia en Mar-a-Lago, ubicada en el sur de Florida, Trump también hizo otras polémicas amenazas. Entre ellas, se negó a descartar una acción militar para tomar el control del Canal de Panamá o incluso de Groenlandia, argumentando motivos de seguridad económica.

Desde la victoria en las elecciones, el magnate republicano ha remarcado que la percepción del mundo hacia Estados Unidos ha cambiado y recibió numerosas felicitaciones de líderes extranjeros. En sus planes para los próximos cuatro años, Trump incluso sugirió la eliminación de la frontera «artificialmente trazada» entre Estados Unidos y Canadá, argumentando que sería beneficioso para la seguridad nacional.

Sin embargo, sus comentarios sobre la posible fusión de Canadá con Estados Unidos tras la renuncia del primer ministro Justin Trudeau generaron indignación en el país vecino. Asimismo, Trump reiteró su deseo de recuperar el control del Canal de Panamá, criticando el acuerdo firmado por Jimmy Carter en 1977 que transfirió su control a Panamá en 1999.

La propuesta del presidente electo de cambiar el nombre del Golfo de México ha generado diversas reacciones tanto a nivel nacional como internacional. Mientras algunos apoyan la idea, argumentando motivos de identidad nacional, otros la consideran una medida unilateral y provocativa.

Por su parte, México no ha emitido declaración oficial al respecto, pero se espera que la cancillería mexicana se pronuncie en los próximos días. La Secretaría de Relaciones Exteriores ha convocado a una reunión de emergencia para discutir la postura a seguir frente a la amenaza de Trump de cambiar el nombre de una de las principales características geográficas de la región.

En medio de las crecientes tensiones diplomáticas, algunos analistas consideran que las declaraciones de Trump podrían afectar las relaciones comerciales y políticas entre Estados Unidos y México, así como con otros países de la región.

A pesar de las críticas y controversias, Trump parece decidido a imponer su visión en la política exterior de Estados Unidos, lo que plantea importantes desafíos y interrogantes para la región.

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