El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció el 24 de marzo de 2025 que en un futuro próximo se impondrán nuevos aranceles a los automóviles, el aluminio y los productos farmacéuticos.

Dichas palabras las realizó durante una reunión con su Gabinete en la Casa Blanca, por lo que Trump declaró que estos productos serían necesarios en caso de conflictos, incluidas guerras.

Asimismo, Trump enfatizó que Estados Unidos ha sido 'estafado por todos los países' y que la implementación de estos aranceles es un paso hacia la autosuficiencia y el respeto internacional.

Por su parte el secretario de Comercio, Howard Lutnick, explicó que el 2 de abril de 2025, se activará el 'Servicio de Impuestos Externos' para recaudar impuestos de los estadounidenses.

El anuncio de los aranceles recíprocos que entrarán en vigor coincide con el fin de la pausa arancelaria para México y Canadá en virtud de ello Lutnick mencionó que el 2 de abril marcará un nuevo capítulo en las relaciones comerciales de Estados Unidos, coincidiendo con el Día de la Liberación de Estados Unidos.

Impacto global

Ante esa noticia, la comunidad internacional observa con interés las medidas de Trump, que podrían influir en las dinámicas económicas globales y en la industria automotriz y farmacéutica.

La medida podría fortalecer la economía estadounidense a corto plazo, pero también podría desencadenar tensiones comerciales.

El movimiento de Trump para instaurar aranceles es un intento de reconfigurar la posición de Estados Unidos en el comercio global, buscando asegurar recursos estratégicos en tiempos de crisis.

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