El director de fotografía de «The Matrix», Bill Pope, describió el trabajo en la segunda y tercera película de la franquicia como «agotadoras».

Hablando sobre la edición más reciente del podcast de Team Deakins, Pope recordó sentirse bajo «presión» durante la realización de The Matrix Reloaded y The Matrix Revolutions, las cuales fueron lanzadas en 2003.

“Todo lo bueno de la primera experiencia (en la primera película) no fue bueno en las dos últimas. Ya no éramos libres «, dijo.

“La gente te estaba mirando. Había mucha presión. En mi corazón, no me gustaron. Sentí que deberíamos ir en otra dirección. Hubo mucha fricción y muchos problemas personales, y se mostró en la pantalla para ser honesto contigo”.

También dijo que ninguna de las secuelas fue su «momento más elevado, ni fue el de nadie más».

Te podría interesar: Viola Davis se arrepiente de haber actuado en “The Help”

«Hay algo acerca de hacer una filmación tan larga, 276 días de filmación, que entumece la mente y el alma y creo que adormece la película … Hay un límite a lo que podemos asimilar».

Sin embargo, Pope elogió las películas y el trabajo de Wachowski como directores. «Acabo de transferirlos a 4K para propósitos de archivo en Warners y escribí los Wachowskis y Keanu [Reeves] y Carrie-Anne [Moss] diciendo que hicimos un buen trabajo, deberíamos estar orgullosos de ellos».