Cómo limpiar las piedras y gemas energéticas
Las piedras energéticas son fuente de energía en muchos sentidos: pueden ayudarte a enfocar tu energía en algún tema, conectar con la parte emocional e incluso son usadas a nivel de sanación. Las gemas poseen vibraciones que se activan en el cuerpo y generan equilibrio en todos los niveles, por lo que son un complemento que agiliza la mejoría de cualquier problema físico o mental.
Puedes encontrar varios tipos de piedras, pero el objetivo común de todas es ellas no es otro que brindar el máximo grado de bienestar y felicidad que necesita cada ser humano.
Con el paso del tiempo, muchas piedras han sido utilizadas como amuletos, pero no solo están pensadas para colocarlas sobre el cuerpo o sostenerlas entre las manos, sino que también pueden estar en diferentes lugares de la casa o de cualquier estancia para facilitar el día a día. El secreto de las piedras energéticas es que muchos de sus cristales tienen miles de años y producen vibraciones elevadas.
¿Por qué las piedras?
El uso de piedras o gemas energéticas como símbolos de poder, de luz y de sabiduría es una técnica que se practica desde tiempos remotos y con el paso del tiempo, muchos pueblos y culturas han ido adaptando sus funciones a sus propias creencias.
Como han estado en contacto con los centros de energía de la tierra, se cree que las piedras energéticas pueden calmar dolores físicos, mentales y sobre todo, emocionales, aunque cada una de ellas responde a un tipo de problema diferente. Normalmente, los cristales opacos son receptores de energía y los transparentes suelen ser emisores o regeneradores de la misma.
La base de estas piedras es que estamos hechos de la misma materia energética, por tanto, podemos trabajar con las piedras para conseguir una armonía plena.
¿Cómo limpiar una piedra energética?
Cuando utilizamos el término “limpiar” no nos referimos a la acción propia del verbo de quitarle el polvo o la suciedad. Limpiar una gema o cristal va mucho más allá, se trata de liberar esa piedra de todo tipo de vibración nociva que pueda depositar en la persona que la lleva. De ahí, la importancia de limpiar cualquier cristal antes de llevarlo encima, porque seguramente haya estado en contacto con otras personas y lugares antes de llegar a nosotros. Es decir, estará cargado de otras energías que pueden ser beneficiosas o perjudiciales.
Las piedras energéticas tienen el poder de liberar a las personas de la negatividad, pero es necesario cuidar el uso de la piedra y limpiarla para que solo genere positividad.
Métodos naturales para limpiar las piedras
Sal marina
Para liberar tus gemas de energías que puedan haber absorbido previamente, el agua y la sal marina son la mejor opción. Si tu piedra no tiene grietas debes dejarla en agua con sal marina durante una noche, incluso puedes añadirle albahaca o lavanda si deseas potenciar el proceso de purificación.
Agua corriente
Es el método más simple, pero llevado a cabo desde hace muchos años. Consiste en colocar las piedras debajo del grifo de agua con una corriente suave. Mientras se mojan es recomendable pedir al universo que, con el agua, se lleve todo lo negativo que contienen.
Con otras piedras
Algunas piedras como es el caso del cuarzo transparente, poseen la capacidad de purificar otras piedras. El método es muy sencillo, simplemente debes colocar la piedra de cuarzo en el mismo recipiente de tus piedras energéticas y al entrar en contacto con ellas se limpiarán solas sin ningún tipo de esfuerzo extra.
Con tu propia energía
Otra de las opciones que mejor funciona para limpiar tus piedras o cristales es la de transmitirles tus propias intenciones y tu energía más positiva. Puedes conectar con ellas pidiéndoles cuidado y protección con tu salvia, porque su función es la de eliminar cualquier tipo de energía antigua.
La salvia y el incienso poseen el poder de eliminar antiguas energías, por lo que son dos métodos que pueden ayudarte a limpiar tus piedras, e incluso, pueden complementarse a otras técnicas.
Luz solar y lunar
Periódicamente, todos nuestros cristales deben ser cargados con luz solar y luz lunar. Hay que colocar las piedras en una bandeja de vidrio y sacarlas al exterior durante un día entero, para que puedan impregnarse de energía diurna y nocturna, no importa que esté nublado.
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