El reiki es un tipo de medicina alternativa japonesa que trabaja con las energías de los chakras y logra una «energía universal» en la persona.

En ocasiones el mal de las personas no se debe a nada físico o mental, tan solo su energía no esta fluyendo por diferentes aspectos de la vida y es cuando el reiki podría ayudarles.

Si no conoces a quien practique la terapia del aura, puede empezar tu al irte informando poco a poco y practicando contigo mismo o seres queridos.

También te podría interesar: Realiza limpia del cuerpo para recibir el Año Nuevo

Las técnicas de Reiki se aprenden fácilmente en un curso impartido por un maestro. La enseñanza se divide en tres grados o niveles, a lo largo de los cuales se accede a todo lo relacionado con la historia y el funcionamiento de esta terapia. Parte de esta información puede encontrarla en un libro sobre Reiki.

Si es la primera vez, elige un lugar tranquilo de la casa. Puede ser el sofá, la cama o en una esterilla en el suelo con un cojín para la cabeza.

Cuando pases de un movimiento a otro, hazlo suavemente. Primero con una mano y luego con la otra. Imagínate que tus manos son imanes y tienes una luz que comienza en el chackra de la coronilla.

Asegúrate que la columna está recta. Túmbate y ponte en postura cadáver, con los pies un poco separados hacia fuera al igual que los brazos. Haz tres respiraciones lentas y profundas.

Junta las palmas de las manos y mentalmente di: pido conexión con la energía. Puedes hacer la frase a tu manera y pensar en una intención antes de comenzar con la práctica. Al terminar recuerda puedes decir una frase parecida a esta: agradezco la energía recibida, cierro conexión. Ve colocando las manos en cada zona de tu cuerpo sin tocarla y repite.