El Ceboruco es uno de los volcanes mexicanos más imponentes ubicado en el estado de Nayarit.

Este majestuoso volcán está ubicado en el municipio de Jala, Nayarit. Basta con un viaje en coche de aproximadamente 40 minutos, partiendo desde el centro de Jala, para que puedas llegar a este imperdible atractivo turístico.

El origen del nombre de este volcán se encuentra rodeado de muchas teorías y suposiciones. Hay quienes creen que deriva de Tzeboruko, que significa “El que bufa con ira”.

Otros afirman que significaría “El Gigante Negro”. Andrés Montero Flores, cronista de Ahuacatlán, afirma que puede traducirse como “pedregal o “hacinamiento de piedras”.

La erupción más reciente fue en 1870, sin embargo, fue tan enérgica que duró cinco años y produjo más de un kilómetro cúbico de lava.

La cual se extendió seis kilómetros hacia el sur del volcán, generando sus famosas piedras volcánicas que puedes observar desde su mirador o al circular por la carretera libre Tepic–Guadalajara.

¿Qué te espera al visitarlo?

Lo primero que encontrarás al visitar el Ceboruco son sus características letras turísticas. A su costado podrás encontrar las fumarolas, vapores que emite la lava del volcán a través de las grietas de la tierra.

Al subir un inclinado y pedregoso camino te encontrarás con un área de telecomunicaciones y el punto de partida para que puedas comenzar a realizar el tour al cráter principal.

Este se alza a una altura de aproximadamente 2280 metros sobre el nivel del mar y se encuentra cubierto de piedra volcánica a su costado.

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