Hace más de cuatro décadas, un grupo valiente de jóvenes salió a las calles de la Ciudad de México para expresar su libertad y exigir el fin de los abusos contra la comunidad homosexual.

Fue la primera marcha LGBT+ en la historia de México.

El contingente se congregó en el Ángel de la Independencia y marchó por la calle de Lerma, luego de ser desviado por la policía para evitar transitar por el Paseo de la Reforma. Portando carteles y coreando consignas como «No hay libertad política si no hay libertad sexual», estos jóvenes desafiaron las normas establecidas y dejaron su huella en la lucha por el reconocimiento de los derechos de la comunidad LGBT+.

En junio de 1978, aproximadamente 11 mil personas se reunieron en la extinta Plaza «Carlos Finlay», marcando así el final de la primera Marcha del Orgullo Homosexual en México.

Aunque no fue la primera manifestación pública de personas homosexuales en el país, sí fue la primera en ser identificada como tal. Esta marcha histórica fue un hito en la lucha por la visibilidad y el respeto de los derechos de la comunidad LGBT+.

Los antecedentes de esta primera marcha LGBT+ en México se remontan al año 1901, cuando se documentó la detención de 41 hombres homosexuales en la Ciudad de México.

La mitad de ellos vestía ropa asociada culturalmente con las mujeres. Entre los detenidos se encontraba Ignacio de la Torre, yerno de Porfirio Díaz, quien fue eximido de ser apresado.

Este incidente, conocido como «El baile de los 41», fue el primer encuentro público de la homosexualidad con el escrutinio social.

Setenta años después, se formó la primera organización a favor de los derechos de las personas LGBT+ en México, llamada «Frente de Liberación Homosexual de México».

Durante la marcha conmemorativa del vigésimo quinto aniversario de la Revolución Cubana, el 26 de julio de 1978, un grupo de homosexuales integrantes del Frente participó en el evento.

Posteriormente, el 2 de octubre del mismo año, otros colectivos de la comunidad LGBT+ se unieron a la marcha conmemorativa por los diez años de la represión estudiantil de 1968. Estas manifestaciones son consideradas precursoras del orgullo en México.

Un año después, en 1979, se llevó a cabo la primera Marcha del Orgullo Homosexual en la Ciudad de México, consolidando así un evento anual que se ha mantenido desde entonces como un símbolo de lucha, visibilidad y reclamo de derechos para la comunidad LGBT+.

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