Un caso que estremeció a la comunidad de Belo Horizonte, Brasil, salió a la luz esta semana tras el hallazgo sin vida de tres mujeres de una misma familia abuela, madre e hija y cuatro perros, dentro de un departamento cerrado herméticamente. El trágico descubrimiento se dio luego de varios días sin contacto con las víctimas.

El hallazgo ocurrió en un departamento del piso 13 de un complejo habitacional ubicado en la capital del estado de Minas Gerais. De acuerdo con los primeros reportes, la alarma fue dada por la abuela paterna de la niña, quien, al no lograr comunicarse con la familia durante varios días, intuyó que algo no estaba bien.

Según declaraciones del portero del edificio, fue la insistencia de la mujer mayor visiblemente angustiada, lo que lo llevó a subir al piso 13 para revisar personalmente. Al acercarse a la vivienda, un fuerte olor proveniente del interior del departamento lo alertó de inmediato, por lo que dio aviso a la policía local.

Los agentes acudieron al lugar y, tras forzar la entrada, se encontraron con un escenario devastador: los cuerpos sin vida de tres mujeres y cuatro perros, todos en distintas áreas del inmueble. Las víctimas fueron identificadas como:

• Cristina Lúcia Bastos Teixeira, de 68 años (abuela materna)
• Daniela Teixeira Antonini, de 42 años (madre)
• Giovanna Antonini Vasconcelos, de 1 año y 11 meses (hija)

Las autoridades confirmaron que las víctimas no habían sido vistas desde hacía al menos seis días, tiempo en el que el departamento permaneció completamente cerrado, sin ventanas ni puertas abiertas, lo cual ha dificultado establecer una causa clara de muerte.

La familia vivía sola en el departamento. Según medios locales, el padre de la menor ya no residía con ellas tras una separación reciente, y no se encontraba presente en la escena. Hasta el momento, las autoridades no han revelado evidencia de violencia física sobre los cuerpos, ni signos visibles de forcejeo o intento de huida.

Por ello, la línea de investigación aún permanece abierta: no se descarta ninguna hipótesis, desde una posible intoxicación accidental hasta otras causas relacionadas con factores ambientales o psicológicos. Peritos forenses trabajan en las autopsias para esclarecer si las muertes fueron simultáneas o si alguna de las víctimas pudo haber fallecido después que las otras.

El hecho de que los animales también hayan muerto dentro del mismo entorno cerrado ha generado aún más preguntas. Algunos expertos consultados por medios brasileños han sugerido la posibilidad de una fuga de gas u otro agente tóxico en el ambiente, aunque por ahora eso no ha sido confirmado oficialmente.

La noticia impactó profundamente no solo a los vecinos del edificio, sino a toda la ciudad. El complejo residencial donde ocurrió el suceso es conocido por ser una zona tranquila, lo que hace aún más desconcertante este trágico evento.

“Fue todo muy repentino. Nadie escuchó gritos, peleas o movimientos extraños. Es como si simplemente se hubieran apagado”, comentó un residente del edificio a un medio local.

Mientras se esperan los resultados de las autopsias y pruebas toxicológicas, las autoridades mantienen el departamento bajo resguardo. La fiscalía de Minas Gerais abrió una carpeta de investigación formal y solicitó testimonios de allegados, vecinos y personal del edificio para reconstruir los últimos días de vida de las víctimas.

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