El indigente, a quien le amputaron las manos con una pala como castigo por un supuesto robo, podría salvar una de sus extremidades gracias a la atención médica en un hospital público especializado.

Luciano Herrera López, de 55 años, en situación de calle, fue atacado el 1 de agosto frente a un Oxxo en Macuspana, lugar natal del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Un video difundido en redes sociales muestra cómo Herrera López fue atacado por dos hombres en una moto. Uno de ellos lo golpeó con una pala, resultando en la amputación de sus dos manos. La víctima, en estado de ebriedad, no pudo defenderse del brutal ataque.

Según el director del Hospital Gustavo A. Rovirosa, Juan Antonio Torres, el estado de la mano derecha del paciente era tan grave que no pudo ser salvada.

Sin embargo, existe una posibilidad de salvar la mano izquierda, que está recibiendo tratamiento con antibióticos y requerirá una cirugía adicional.

Este viernes, Herrera López se someterá a otro procedimiento quirúrgico en el Hospital Rovirosa, conocido por su excelencia en traumatología en la región.

El caso ha llamado la atención pública, especialmente después de que el agresor de Herrera López, Freddy «N», fuera asesinado a balazos el 7 de agosto, presuntamente en represalia por el ataque.

La Fiscalía General de Tabasco aún no ha confirmado si Freddy «N» era el atacante de Herrera López.

Lo que sí está claro es que la víctima sufrió la amputación de su mano derecha, mientras los médicos del Hospital Gustavo Rovirosa continúan trabajando para salvar la mano izquierda del indigente.

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