En la historia de crímenes en México destacan algunos casos en los cuales las madres le han quitado la vida a sus hijos.

«La hiena de Querétaro»

Sin duda, el caso más sonado en México es el de Claudia Mijangos, conocida como «La hiena de Querétaro», quien recién salió del Penal de Tepepan, en la Ciudad de México, tras haber purgado una condena de 30 años por filicidio.

Y es que el 23 de abril de 1989, Claudia apuñaló a sus hijos de 11, 9 y 6 años de edad por órdenes de una voz en su cabeza, de acuerdo con medios de esa época y algunas cartas que ella misma escribió.

Bebé asesinado en supuesto ritual en Chimalhuacán

El 29 de enero de 2018, Marduk Azazel López, un bebé de apenas 8 meses, fue asesinado por su madre y su nueva pareja supuestamente en un ritual satánico al interior de su casa en Chimalhuacán.

La abuela del pequeño desmintió la versión del supuesto ritual; sin embargo, sí confirmó a medios y autoridades que el niño era víctima de violencia por parte de Leticia, su madre, y Dorian, el novio de esta.

Mata a sus dos hijos y manda fotos al padre

En San Juan del Río, Querétaro, Guadalupe, en un aparente arranque de celos, degolló a sus dos hijos de 14 y 6 años en agosto de 2017 y envió fotos del crimen a su pareja, quien vivía en Estados Unidos.

De acuerdo con la abuela de las víctimas, una noche antes Guadalupe y el papá de sus hijos habían discutido, pues la mujer se había enterado de que su esposo tenía una nueva familia. Tras el crimen, «Lupita» se suicidó.

No tenía dinero para comida y envenenó a sus hijos

El 3 de mayo de 1996, la poblana Verónica Aguilar Furlong, de 29 años, envenenó a sus tres hijos de 8, 7 y 2 años de edad, poniendo veneno para ratas en las milanesas que comerían.

La mujer explicó que cometió el crimen porque su situación económica era difícil y ya no tenía dinero para alimentarlos: meses antes había perdido su empleo en un banco y el papá de sus hijos no se hacía responsable de ellos.

Su pareja abusaba de sus hijos; se suicidó con ellos

Mireya Agraz se suicidó con sus tres hijos menores de edad y sus padres en la colonia San Jéronimo Lídice, en la alcaldía Magdalena Contreras de la Ciudad de México.

La mujer había denunciado previamente que su exesposo abusaba sexualmente de su hijo y las gemelas que habían procreado; ante la supuesta negativa de las autoridades por atender su caso, Mireya habría tomado la decisión del suicidio.

«La Güera» que quemó a sus hijos

Rocío del Carmen Hernández Rivera, de 25 años, quemó a sus dos hijos mientras dormían el 25 de marzo de 2009 en Saltillo, Coahuila, para darle «un escarmiento a su esposo».

Tras discutir con su pareja -con quien trabajaba en un bar- Rocío, a quien conocían como «La Güera» se echó gasolina encima y se prendió fuego, para después lanzarse encima de los niños, quienes tenían 6 y 11 años.

Emily mató a su hijo porque era travieso

En Baja California, el 18 de agosto de 2018, Emily Judith, de 26 años, llevó a su hijo de 4 años al consultorio de una farmacia ya sin signos vitales.

Posteriormente, la joven madre confesó que lo había matado a golpes «porque era muy travieso»; los peritajes confirmaron que el niño había sido maltratado en reiteradas ocasiones.

Caso de Paulette

Aunque las investigaciones periciales no determinaron que Lizette Gebara asesinó a su hija Paulette Farah en 2010, el caso fue considerado en un inicio como filicidio.

El 22 de marzo en Huixquilucan, Estado de México, Paulette, de 4 años, fue reportada como desaparecida; una noche antes la dejaron en su recámara y esa fue la última vez que la vieron con vida.

Su cuerpo fue encontrado el 30 de marzo debajo de su cama, luego de 10 días de intensa búsqueda no solo en la casa, sino en las zonas aledañas; los primeros indicios apuntaron a que su madre, Lizette, la habría asesinado; al final, las autoridades concluyeron que la niña había muerto por asfixia accidental tras caer junto a su cama.

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