Aunque esto pudiera sonar como una locura, definitivamente es cierto. Los humanos sí pueden nacer con cola y a esto se le conoce como cola vestigial.

La cola vestigial es más que nada un exceso que aparece en la parte inferior de la espada de una persona, el fenotipo analógico se le da debido a su forma alargada que se asemeja a la cola de un animal.

Queda claro que este fenómeno es bastante  extraño o muy poco común, ya que en todo el mundo hay documentados alrededor de 100 casos desde el siglo XVII, que fue cuando se descubrió esta patología humana y se analizó.

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La cola vestigial que puede generarse en los seres humanos no posee ni estructura ósea, ni médula, justo somo se puede observar en las colas de los perros, gatos y reptiles. Los cuales son el vestigio más cercano a lo que fueron los animales en el pasado.

Un poco de historia

En la historia de la humanidad normalmente se dice que nuestro origen se deriva de los primates y que las condiciones de la tierra en esos tiempos forzaron a las especies a salir a la superficie y adaptarse a vivir en a tierra.

Por lo tanto, las referencias de esta evolución que han estudiado desde hace siglos, indica que el ser humano y muchos otros animales pueden conservar aún algunos vestigios de sus antepasados. La cola vestigial es un gran ejemplo de esto.

Otro órgano vestigial

Los órganos vestigiales son parte de nuestro organismo, pero no cuentan con ninguna utilidad esencial para la subsistencia del ser humano.

En la antigüedad puede ser que si hayan sido útiles, como por ejemplo el apéndice, que no es nada más que una parte extra del intestino delgado, que tal vez les servía a nuestros antepasados herbívoros, pero a nosotros hoy en día ya no.