El consumo excesivo de cloruro de sodio, mejor conocido como sal, puede generar cambios en el cerebro que provocan una función cognitiva deficiente, la cual produce demencia con el paso de los años provoca demencia, advierte un estudio del Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Apoplejía de Nueva York.

Por años, los médicos han advertido que añadir sal en grandes cantidades a la comida está vinculado con el desarrollo de enfermedades crónicas, complicaciones cardiovasculares, daños en el hígado y los riñones, entre otros problemas de salud.

Sin embargo, poco se sabía sobre los daños que provoca en el cerebro este mineral, debido a lo cual, los especialistas estadounidenses llevaron a cabo el estudio recientemente publicado en la revista Nature.

El experimento se aplicó ratones alimentados con una dieta que contenía entre ocho y 16 veces la cantidad normal de sal. Dos meses después, se les aplicaron pruebas cognitivas.

Los científicos notaron que la memoria de los roedores había sufrido afectaciones, pues ahora eran incapaces de reconocer los objetos nuevos que se les presentaban y, en comparación con otros animales que ingerían una dieta normal, tardaron más tiempo en salir de un laberinto.

Los especialistas consideran que estos resultados podrían explicarse por la caída de los niveles de óxido nítrico en el cuerpo, que es esencial para el flujo sanguíneo y la disminución de la presión arterial, y se reduce a causa de la sal.

Esto afectaría a una proteína cerebral llamada Tau, que debido al sodio tendería a acumularse. Cuando Tau se ve afectada por la gota de óxido nítrico, comienza a acumularse en los vasos sanguíneos de los ratones, provocando su obstrucción.

“Tenemos que mantener la sal bajo control. Puede alterar los vasos sanguíneos del cerebro y hacerlo de manera cruel” comentó Costantino , autor principal de la investigación