En los últimos años, la ortiga se ha hecho más conocida por su completa composición nutricional. Hablamos de un alto contenido de minerales, calcio, hierro, magnesio, potasio. Es depurativa y permite una gran versatilidad de usos en la cocina: Gracias a su particular sabor podemos añadirla desde a ensaladas hasta tortillas, sopas o cremas. Pero, ¿qué nos aporta nutricionalmente hablando? Cuenta con propiedades astringentes, estimulantes, purificantes y antibacterianas. ¡Vamos a verlo!
Es diurética
Una de las propiedades de la ortiga es que ayuda a la eliminación de toxinas y otros elementos a través de la orina. Es una excelente aliada para las personas que tienen problemas con la retención de líquidos así como para las personas con problemas de reuma, gota, artritis o cálculos renales, entre otros.
Es depurativa
Gracias a la composición de la ortiga, entre sus grandes beneficios se pueden encontrar el que es rica en propiedades antidiarreicas. Esto se traduce en una ayuda extra a estimular las secreciones estomacales e intestinales, así como a regular el tránsito intestinal irregular.
Propiedades antiinflamatorias
Contiene minerales como el silicio y el boro que cuentan con un efecto calmante, reduciendo el dolor y la inflamación que vienen causados por el lumbago, la ciática, la gota o la tendinitis. Los baños en agua caliente con esta planta te aliviarán de manera rápida y natural.
Propiedades antioxidantes
La versatilidad de la ortiga permite cocinarla como cualquier verdura y obtener de ella una gran cantidad de antioxidantes que nos ayudarán a retrasar el envejecimiento y a prevenir enfermedades degenerativas.
Propiedades analgésicas
Junto a su acción antiinflamatoria, la ortiga posee propiedades analgésicas. Muchas veces nos empeñamos en aliviar algunos dolores leves con medicamentos que, a la larga, pueden tener repercusiones en nuestra salud. En este sentido, la ortiga cuenta con efecto positivo frente a los dolores, por ejemplo de la artritis, y con el respaldo de ser una planta de origen natural.