El verano es sinónimo de playa y/o piscina. Y la diversión acuática no solo se cierne al relax de las vacaciones o los deportes de agua. También se extiende al terreno sexual.
Mantener relaciones íntimas en el agua es, sin lugar a duda, una de las fantasías sexuales más extendidas debido al alto nivel de excitación que generan, así como la carga de erotismo asociada a estos momentos. Por eso la marca de juguetes sexuales de lujo ha creado su propia versión del Kamasutra -el mítico manual del sexo hindú- en versión acuática: el «Aquasutra», o lo que es lo mismo: el ranking de mejores posturas sexuales para hacer bajo el agua.
Tanto si es tu primera vez acuática, como si ya habías alcanzado el clímax entre las olas, tienes que tomar nota de estas: el caballito de mar, la escalera de placer, el abrazo o la colchoneta del placer. ¿No suena nada mal?
Te explicamos en qué consiste cada una de estas posturas del «Aquasutra» para que vivas tu verano más placentero:
El caballito de mar: esta es una posición perfecta para ponerla en práctica en la bañera o incluso en la piscina, aunque debe ser en una zona donde el nivel del agua sea bastante bajo. Para llevar a cabo esta postura el hombre debe recostarse y flexionar ligeramente sus rodillas, mientras que la mujer, de espaldas a él, se coloca encima reclinada y apoyando su cuerpo sobre las piernas de él. Esta posición, que ofrece una penetración profunda, permite a la mujer tener el control total de la velocidad.
El abrazo: una de las principales ventajas que ofrece el sexo en el agua es que pesamos menos. En este sentido, “el abrazo” es una postura ideal para ponerla en práctica en la playa. Para realizarla, el hombre coge en brazos a la mujer, quien antes de iniciar la penetración entrelaza sus piernas alrededor de la cadera de su pareja. Una versión incluso más placentera, debido a que ofrece una penetración más profunda, es que la mujer coloque sus piernas por encima de los hombros del hombre, aunque entonces no se disimula tanto.
Escalera de placer: como su propio nombre indica, para poder poner en práctica esta postura necesitamos una escalera. La mujer se sienta al borde de uno de los escalones de la piscina y de espalda a la escalera, y se reclina hacia atrás. El hombre, por su parte, se coloca de pie frente a ella para iniciar la penetración, lo que le permite tener el control total del movimiento, ritmo e intensidad. Para aportar mayor estimulación de los genitales la mujer mueve su cadera hacia adelante, hacia atrás o en círculos, ejerciendo presión contra él.
La colchoneta del placer: esta postura es compleja porque requiere de mucha coordinación, pero una vez se pilla el truco, es realmente placentera. Para probarla es necesario que el hombre se suba a una colchoneta boca arriba con las piernas ligeramente abiertas, mientras que la mujer puede sentarse sobre él, de frente, con una pierna a cada lado de la colchoneta. Cuando se encuentra el ritmo adecuado, la flexibilidad de la colchoneta y el movimiento del agua aportan nuevas sensaciones.