En medio de los devastadores incendios forestales que han azotado la zona de Pacific Palisades, en Los Ángeles, un fenómeno natural impresionante y peligroso se hizo presente, se trata de un  «tornado de fuego» que fue avistado girando en medio de las llamas.

Este vórtice de fuego, que fue captado en video y compartido en redes sociales debido a su imponente aspecto, ha dejado a muchos conmocionados.

Expertos meteorólogos explican que este fenómeno se produce cuando una brisa de fuego se encuentra con una corriente de aire ascendente, creando un vórtice que levanta las llamas y forma un tornado de fuego.

Estos tornados son considerados extremadamente peligrosos debido a que arrastran humo, escombros e incluso fuego a medida que se desplazan, como se puede observar en las impactantes imágenes del video publicado.

Los tornados de fuego pueden variar en tamaño, desde menos de 30 centímetros hasta más de 150 metros.

Incluso los remolinos de fuego más grandes pueden llegar a ser tan destructivos como un tornado de fuego pequeño, con vientos tan fuertes que han sido capaces de arrancar árboles, derribar vehículos e incluso arrancar techos de casas, según datos proporcionados por el Servicio Forestal de Estados Unidos.

En Tokio ocurrió el tornado de fuego más devastador de la historia

De hecho, el tornado de fuego más devastador registrado hasta la fecha tuvo lugar en Tokio en 1923, provocado por incendios desatados tras un terremoto, causando la muerte de aproximadamente 38,000 personas en tan solo 15 minutos.

Otra de las manifestaciones más recientes de este fenómeno tuvo lugar durante el incendio de Carr en Redding, California en 2018, donde se registraron velocidades de viento superiores a los 230 km/h.

Ante la presencia de un tornado de fuego, las autoridades recomiendan extremar las precauciones y seguir las indicaciones de evacuación correspondientes, ya que se trata de un fenómeno impredecible y extremadamente peligroso.

El impacto de estos remolinos de fuego puede ser devastador y causar una rápida propagación de las llamas, poniendo en peligro no solo la flora y fauna de la zona, sino también la vida de las personas que se encuentren en su camino.

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