El mundo  se quedó en  incertidumbre este jueves ante la inesperada cancelación del despegue de la nave espacial de Rusia Soyuz MS-25. Programada para partir desde la Estación Espacial Internacional (ISS) con tres tripulantes a bordo, la misión fue abruptamente interrumpida. La agencia espacial rusa, Roscosmos, anunció que la decisión de abortar la misión se tomó cuando faltaban tan solo 20 segundos para iniciar el viaje.

La tripulación, integrada por la astronauta de la NASA Tracy Dyson, el cosmonauta ruso Oleg Novitski y la primera cosmonauta bielorrusa Marina Vasilevskaia, estaba preparada para emprender su viaje espacial. Sin embargo, según informes de la NASA, la secuencia de motores que precede al despegue no se activó como se esperaba, lo que resultó en la interrupción de la cuenta regresiva.

Yuri Borisov, director de Roscosmos, explicó que una caída de tensión en una batería fue la causa del fallo técnico que obligó a suspender la misión. A pesar de este contratiempo, se informa que los tripulantes se encuentran en perfectas condiciones y se espera que el nuevo intento de despegue se realice el próximo 23 de marzo a las 12:36 horas GMT.

Desafíos en la industria de Rusia

Esta cancelación representa un nuevo revés para el sector espacial ruso, que ha enfrentado problemas de financiación, escándalos de corrupción y recientes fracasos. Entre estos, destaca la pérdida de la sonda lunar Luna-25 en agosto de 2023. La industria espacial rusa, destacada por tradición, ha enfrentado una serie de contratiempos en los últimos años. Esto incluye fugas de refrigerante en vehículos espaciales acoplados a la ISS y la caída de la sonda lunar mencionada.

A pesar de estos desafíos, Moscú ha expresado su intención de abandonar la ISS después de 2024 para concentrarse en la construcción de su propia estación espacial. La falta de innovación en el sector espacial ruso, que se basa en gran medida en tecnologías soviéticas, ha dejado a la agencia espacial rusa rezagada en comparación con compañías privadas como SpaceX, liderada por Elon Musk.

La cooperación ruso-occidental en el espacio también se ha visto afectada por conflictos geopolíticos, como la intervención de Rusia en Ucrania.La Estación Espacial Internacional continúa sirviendo como un importante punto de encuentro para la colaboración activa entre Rusia y Estados Unidos.

El equipo de la nave Soyuz abortó el despegue, que tenía el objetivo de acoplarse al módulo Prichal de la ISS, para seguir con las operaciones en el segmento ruso de la estación.

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