El Hotel Posada del Sol, ubicado en la colonia Doctores de la Ciudad de México, es una edificación que ha dejado una huella imborrable en la historia arquitectónica de la ciudad.

Arquitectura y Desafíos Financieros

El edificio destaca por su arquitectura ecléctica, una fusión única de estilos art déco, barroco y neocolonial, que lo convierte en una pieza de gran valor histórico. El hotel contaba con más de 600 habitaciones, un teatro, una capilla, una biblioteca y una piscina, lo que reflejaba la magnitud del proyecto. Sin embargo, los problemas financieros que enfrentó Saldaña durante la construcción impidieron que el proyecto se completara. A pesar de que muchas de estas instalaciones quedaron incompletas, el hotel abrió sus puertas al público en 1945, aunque solo por un corto período de tiempo.

Leyendas y Misterios

Una de las leyendas más conocidas en torno al Hotel Posada del Sol es la misteriosa desaparición de su creador, el ingeniero Saldaña. En 1952, se rumorea que Saldaña, agobiado por las deudas, se suicidó dentro del hotel. Se dice que lo hizo colgándose de una estatua de San Francisco de Asís ubicada en la entrada de la capilla del hotel. Esta trágica historia fue el punto de partida para diversas leyendas que aún perduran sobre el lugar, alimentando el misterio que lo rodea.

Espíritu Infantil

Otro relato escalofriante relacionado con el hotel tiene como protagonista a un espíritu infantil. Después de la muerte de Saldaña, el hotel fue convertido en una guardería para los trabajadores del gobierno. Según se cuenta, una niña quedó atrapada en el hotel y falleció en el lugar, lo que dio origen a una leyenda en la que su espíritu maldice a quienes se atrevan a entrar sin dejarle una ofrenda. Por esta razón, algunas personas aseguran que dejan dulces, juguetes o pequeñas ofrendas en un altar improvisado dentro del hotel, ya que sienten una energía pesada en una de las habitaciones donde se cree que el espíritu de la niña reside.

Sucesos Paranormales

Durante los años 60, el Hotel Posada del Sol fue sede del Instituto Nacional para el Desarrollo Comunitario y Vivienda Rural (IDECO), lo que sumó más relatos misteriosos al lugar. Empleados y visitantes del instituto aseguraron haber presenciado fenómenos paranormales, como ruidos extraños y apariciones fantasmales, lo que avivó aún más las leyendas de la posada. Estos relatos alimentaron el misterio que envolvía el lugar, transformando al hotel en una atracción popular entre aquellos interesados en lo paranormal.

Abandono y Olvido

Con el paso del tiempo, el Hotel Posada del Sol quedó en total abandono. A pesar de su estado deteriorado, el edificio sigue siendo una de las piezas más interesantes de la historia de la Ciudad de México. Su arquitectura imponente y las historias que lo rodean atraen a curiosos y aficionados al misterio, quienes se sienten atraídos por su aura de enigma y desolación. Aunque muchas personas visitan el lugar para intentar captar alguna presencia paranormal, el edificio sigue siendo un recordatorio de un pasado glorioso que nunca se completó.

Expropiación por el Gobierno

Tras el cierre del hotel, el gobierno de Miguel Alemán Valdés expropió el edificio, dándole un uso distinto al original. En la década de 1960, el inmueble fue destinado para albergar diversas dependencias gubernamentales, entre ellas el IDECO. A pesar de su reutilización, el hotel nunca recuperó su esplendor inicial y con el tiempo el edificio fue abandonado de nuevo. En las últimas décadas, han surgido varias propuestas para rehabilitar el Hotel Posada del Sol, entre ellas, la idea de convertirlo en una de las Universidades del Bienestar durante la administración de Claudia Sheinbaum como jefa de Gobierno de la CDMX. Sin embargo, hasta la fecha, ninguna de estas iniciativas se ha concretado, y el hotel permanece en el olvido, sumido en el misterio y en la historia de una época que ya no existe.

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