En una sorprendente vuelta de los acontecimientos, el pequeño pueblo de Götene, al oeste de Suecia, ha captado atención mundial al lanzar una oferta peculiar de terrenos a un precio simbólico.

Esta iniciativa, descrita como una «idea un tanto extravagante» por el alcalde Johan Mansson, tenía como objetivo revitalizar la zona y atraer nuevos residentes.

La campaña comenzó en abril, ofreciendo terrenos abandonados durante décadas a un costo de una corona sueca por metro cuadrado, equivalente a aproximadamente 10 centavos de dólar estadounidense. Los compradores interesados debían comprometerse a construir una vivienda en un plazo de dos años, lo que implicaba gastos adicionales considerables como permisos de construcción y conexión a servicios básicos.

A pesar de las modestas expectativas iniciales, Götene logró vender tres parcelas en las semanas posteriores al lanzamiento de la campaña, un éxito considerable para un pueblo de apenas cinco mil habitantes.

Sin embargo, el verdadero impacto llegó cuando una cadena local de televisión emitió un reportaje a finales de junio, desatando un fenómeno viral en las redes sociales y atrayendo la atención de medios nacionales e internacionales.

El alcalde Mansson mencionó que el pueblo recibió una avalancha de correos electrónicos y llamadas de posibles compradores de Europa, Asia (especialmente de India y Pakistán), Estados Unidos, Australia y América del Sur. Ante la abrumadora respuesta, las autoridades locales suspendieron temporalmente las ventas para evaluar todas las ofertas recibidas.

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