Recientemente surgió una noticia de que la gente buscaba cambiarle el nombre a las gorditas por ser un término discriminatorio, pero ¿es cierto? ¿Se puede?

Primeramente se trata de una noticia falsa, que hasta citaba a una diputada del Partido Revolucionario institucional (PRI), María Alemán, pero tal idea no existe.

Todo se trató de una broma por parte de un medio de Querétaro, pero ¿y si fuera cierto? A cómo va la sociedad de “sentida” puede haber un futuro sin gorditas.

La palabra gorditas se refiere a la comida mexicana donde una tortilla de harina o maíz es rellena de algún guiso y su forma circular aparenta estar obesa.

El cambiar el nombre de algún platillo o comida típica, por ley si es posible, lo que lograría que varios restaurantes cambien menús y presentaciones.

Sin embargo, para la cultura popular estaría complicado el cambio de nombre, incluso cuando se modifica una calle, para la gente se sigue llamando como antes.

Entonces, el nombre no desaparece, no todavía y seguirá siendo la garnacha predilecta de los puestos mexicanos ya sea frita, al vapor o como te guste.

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