Las olas de calor no causan rabia en perros y gatos, un mito que resurge en primavera, especialmente cuando se informan contagios de animales a humanos mortales en México.

Expertos desmitifican esta creencia y explican el origen de la confusión.

Gabriela Ramírez Díaz, del Hospital Veterinario de Pequeñas Especies de la UDG, señala que la asociación entre rabia y calor surge de las campañas de vacunación antirrábica realizadas en meses cálidos.

La rabia es viral y se transmite por saliva de animales infectados a través de heridas en la piel.

Aunque los contagios aumentan en primavera-verano, no se debe a las altas temperaturas.

Monroy López, de la UNAM, explica que los picos de contagio coinciden con los ciclos reproductivos de los animales, especialmente en perros.

La primavera favorece los ciclos estrales y la formación de jaurías, aumentando las oportunidades de transmisión.

Para prevenir la rabia, es esencial vacunar a las mascotas y buscar atención médica inmediata tras cualquier mordedura animal.