Un niño conocido como ‘Santi’ se volvió viral en redes sociales tras tomar el celular de su mamá y realizar una inesperada compra por miles de pesos sin su permiso, sorprendiendo a su familia y generando un intenso debate en internet.
En un video que circula en redes, se puede observar a Santi llorando desconsoladamente después de recibir el regaño de sus padres, quienes descubrieron la compra demasiado tarde. El incidente ocurrió cuando revisaron un cargo inesperado en su cuenta bancaria, descubriendo que el pequeño había adquirido un costoso artículo mediante una plataforma digital.
El objeto en cuestión resultó ser el juguete soñado de Santi: la Torre de Los Vengadores de Marvel, un exclusivo set de LEGO compuesto por más de cinco mil piezas. Para conseguirlo, el niño usó el teléfono y la cuenta bancaria de sus padres para realizar la compra a través de Amazon, generando un cargo de $9,375 pesos mexicanos, una cifra considerable para la economía familiar.
El set de LEGO adquirido no es cualquier juguete; incluye figuras de colección de personajes icónicos como Thor, La Viuda Negra y otros 24 superhéroes de las películas de Marvel. Este nivel de detalle y exclusividad explica su elevado precio. Sin embargo, los padres de Santi señalaron que no podían permitirse tal gasto y que, lamentablemente, tendrían que devolver el artículo, a pesar del entusiasmo del niño.
La situación rápidamente llamó la atención en redes sociales, donde los usuarios no tardaron en compartir opiniones divididas. Por un lado, algunos criticaron a la madre por permitir que Santi tuviera acceso al celular sin supervisión, señalando que ese descuido fue lo que provocó el incidente. Por otro lado, hubo quienes argumentaron que quitarle el juguete al niño podría causarle un trauma, destacando la importancia de manejar la situación con sensibilidad.
A pesar de las críticas, también hubo comentarios de apoyo hacia los padres, especialmente hacia la mamá, quien enfrentó la difícil tarea de lidiar con el cargo inesperado. Muchos usuarios señalaron que no es justo juzgarla, ya que no todas las familias cuentan con los recursos para absorber un gasto de esa magnitud.