El cometa Halley, conocido por su ciclo orbital de aproximadamente 76 años, volverá a iluminar el cielo terrestre a través de la lluvia de estrellas Oriónidas. Este fenómeno se produce cuando los restos del cometa entran en contacto con la atmósfera de la Tierra, provocando su combustión y generando meteoros que se pueden observar en la noche.

Aunque el cometa no será visible nuevamente hasta 2061, las Oriónidas brindan un espectáculo celeste que los mexicanos podrán disfrutar durante octubre.

La lluvia de estrellas Oriónidas alcanzará su máxima actividad entre la noche del lunes 21 de octubre y la madrugada del 22. Durante este período, se anticipa que se podrán ver entre 10 y 20 meteoros por hora, según la Sociedad Americana de Meteoros. El momento ideal para observar este fenómeno es después de la medianoche, cuando la constelación de Orión se eleva en el cielo.

Para disfrutar de una mejor visibilidad, es aconsejable alejarse de las luces artificiales y observar en dirección opuesta a la Luna, cuyo brillo puede interferir con la vista de los meteoros más tenues. Permitir que tus ojos se adapten a la oscuridad durante al menos 30 minutos puede aumentar las posibilidades de captar este espectáculo.

Aunque el pico de la lluvia de meteoros será el 21 de octubre, las Oriónidas seguirán siendo visibles hasta el 22 de noviembre, aunque en menor cantidad. Según los expertos, incluso días después del pico se pueden ver varios meteoros gracias a la “meseta de actividad” que caracteriza a este evento.

Las Oriónidas son causadas por los restos de polvo y partículas dejados por el cometa Halley, que pasó por nuestro sistema solar en 1986 y regresará en 2061. Este año, la presencia de la Luna creciente antes de la medianoche durante el evento pico podría dificultar la visibilidad de algunos meteoros.

Para aquellos que no puedan disfrutar de las Oriónidas, 2024 promete más eventos astronómicos. En noviembre, se podrán observar las lluvias de meteoros Táuridas del Sur y del Norte, seguidas por las Leónidas. Diciembre concluirá con las famosas Gemínidas y Úrsidas, garantizando que el cielo nocturno continúe ofreciendo espectáculos impresionantes para los entusiastas de la astronomía.