El periodo vacacional de invierno para los estudiantes de educación básica en México comenzó el 19 de diciembre de 2024 y se extenderá hasta el 8 de enero de 2025, según el calendario escolar establecido por la Secretaría de Educación Pública (SEP).
Este receso involucra a más de 34 millones de alumnos y más de 2 millones de docentes en todo el país.
La pausa escolar tiene repercusiones significativas en la economía mexicana.
Por un lado, representa un alivio temporal en los gastos familiares relacionados con la educación, como transporte y alimentación escolar.
Por otro lado, sectores como el turismo y el comercio minorista experimentan un incremento en la actividad económica, ya que muchas familias aprovechan este periodo para vacacionar o realizar compras navideñas y de fin de año.
Sin embargo, también se observa un aumento en los gastos familiares al prepararse las festividades de Navidad, Año Nuevo, regalos, vacaciones en la playa o en otros lugares y preparación del regreso a clases.
Los padres de familia enfrentan costos elevados en la compra de útiles escolares, uniformes y materiales, lo que puede poner a prueba la economía familiar.
En resumen, el periodo vacacional de invierno en México no solo brinda un descanso a la comunidad educativa, sino que también influye en diversos aspectos de la economía nacional, generando tanto alivios como desafíos financieros para las familias mexicanas.