Por: Alejandro González

Monterrey, Nuevo León. – El árbitro duranguense Marco Antonio «Gato» Ortiz aplicó el reglamento y a los seis minutos mandó al jugador francés del equipo de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) a cambiarse.

Fue en el partido entre los Tigres y el San Luis cuando el silbante, nacido en Durango, se dio cuenta que los calcetones del jugador felino Florian Thauvin tenía vendajes blancos, algo que prohíbe el reglamento impuesto por la Federación Mexicana de Futbol (FMF).

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De acuerdo con la regla número 4 de dicho estatuto, ambos equipamientos, tanto calcetones como el vendaje, deben ser del mismo color, razón por la que el colegiado le pidió al francés cambiar el vendaje, haciendo uso de su autoridad debidamente.

Frente a esta situación, y antes de que les llamaran la atención, los futbolistas André Pierre Gignac y Javier Aquino también decidieron hacer la misma acción que su compañero.