El combinado Tricolor, pese a la superioridad númerica, empató 2-2 con la Vinotinto y ahora tendrá que vencer sí o sí a Nueva Zelanda y esperar una combinación de resultados

México dejó en suspenso sus aspiraciones por llegar a la siguiente fase de la Copa del Mundo Sub-17. El Tricolor empató 2-2 contra Venezuela, resultado que provoca que la Selección Mexicana ya no dependa de sí mismo para seguir “vivos” en el torneo.

Ahora, el combinado que dirige Raúl Chabrand, tendrá que vencer sí o sí a Nueva Zelanda y esperar una combinación de resultados para continuar en la competencia que se lleva a cabo en Indonesia.

La Selección Mexicana no carbura en la justa que se realiza en Singapur. Fue exhibido en el primer partido, ante el gigante Alemania, y ahora comenzó a remar contra corriente desde el minuto seis, ante Venezuela, debido al gol de Alejandro Cichero, para el 1-0.

México tuvo un respiro al minuto 40, porque cuando el conjunto azteca armaba un contragolpe, Giovanny Sequera lo cortó con una fuerte falta que le costó una tarjeta roja. Eso le entregó el juego a los de Chabrand.

En el segundo tiempo, con un elemento más, el Tri se convirtió en tormenta. Se fue encima de la Vinotinto y el joven Stephano Carrillo consiguió anotar su primer gol en la Copa del Mundo, con un remate de cabeza, empató a uno.

El empate era poco y Luis Ortiz hizo el 2-1, con un disparo desde fuera del área, que se le coló a Jorge Sánchez, tras pegar en el poste.

Este marcador, al minuto 67, parecía el fin de Venezuela, pero no lo fue. Así como México revivió con la expulsión, la sudamericana respiró gracias a un error del arquero Bedolla. Nicola Profeta no desaprovechó la oportunidad e hizo el empate a dos en la vía penal.

Por: Fernanda Arreola