El periodista Manuel López San Martín se pronunció luego de que Morena, el Partido del Trabajo (PT) y el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) solicitaran al Instituto Nacional Electoral (INE) la remoción de su rol como moderador del primer debate presidencial. Esta petición surge a raíz de acusaciones de falta de imparcialidad por parte del periodista, especialmente en comentarios críticos hacia funcionarios del Gobierno Federal, como Hugo López-Gatell, durante la pandemia.

Manuel López San Martín defiende el ejercicio periodístico

López San Martín defendió su derecho a la libertad de expresión y a ejercer el periodismo de manera crítica, independientemente de los procesos electorales en curso. En sus palabras, expresó que la crítica a López-Gatell se da en el marco de la libertad de expresión y su ejercicio periodístico, señalando que los periodistas tienen derecho a criticar a servidores públicos y exfuncionarios, así como a sus decisiones de gobierno.

El periodista hizo hincapié en la diferencia entre el rol de un periodista al frente de un espacio noticioso y el de un moderador en un debate. Mientras que en un programa periodístico es posible fijar postura y emitir comentarios y críticas, en un debate la imparcialidad es condición necesaria. López San Martín enfatizó que el debate debe ser un ejercicio de contraste de ideas, propuestas y visiones, donde destaquen las candidaturas y no los moderadores.

Un llamado a la imparcialidad en los debates

El periodista concluyó reafirmando su compromiso con el ejercicio periodístico crítico y la libertad de expresión, subrayando que su labor como moderador en un debate no debería verse afectada por sus opiniones vertidas en otros contextos. Asimismo, insistió en que los periodistas tienen la responsabilidad de señalar y criticar las acciones y decisiones de los servidores públicos en aras de una sociedad informada y participativa.

En un contexto político-electoral, donde la imparcialidad y la transparencia son elementos fundamentales, la defensa de la integridad del proceso de debates es crucial. De esta manera, Manuel López San Martín instó a que el debate sea un espacio donde prevalezcan las ideas y propuestas de las candidaturas, sin que los moderadores se conviertan en el centro de atención o sean objeto de controversias que desvíen el foco del verdadero propósito del evento.

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