Devastación en Guerrero por el huracán ‘Otis’ pone en riesgo el futuro académico de siete de cada diez estudiantes en el estado, según el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO). La suspensión de clases y los daños a las escuelas han dejado a este gran porcentaje de estudiantes en peligro de rezago académico.

A raíz del paso destructivo del huracán ‘Otis’, la autoridad educativa local ordenó el cierre temporal de escuelas en los municipios afectados, ante la falta de condiciones adecuadas de salubridad, seguridad e infraestructura. La Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana declaró a 46 de los 85 municipios del estado como zonas de desastre, donde residen estos estudiantes de educación obligatoria.

El análisis realizado por el IMCO revela cifras aún más alarmantes. Dentro de los 46 municipios afectados, se estima que hay 625 mil estudiantes, 38 mil docentes y 7 mil 498 escuelas de educación obligatoria que se verán afectadas por el cierre de escuelas debido a la emergencia.

Cabe destacar que el Plan General de Reconstrucción de Guerrero presentó un monto de 10 mil millones de pesos para servicios, pero sin especificar suficientemente su aplicación en el ámbito educativo.

¿Cómo prevenir el rezago académico tras el paso de ‘Otis’ en Acapulco?

El impacto de la interrupción de clases presenciales puede tener consecuencias negativas en el aprendizaje de estos estudiantes, especialmente para aquellos que ya enfrentan desafíos socioeconómicos. El IMCO enfatiza la necesidad de tener un recuento preciso de las condiciones de las 7 mil 500 escuelas afectadas, como primer paso para evitar que las consecuencias educativas se agraven.

‘Para prevenir mayores afectaciones a la formación de los niños y jóvenes en las zonas más afectadas, es crucial que las autoridades prioricen la recuperación de los servicios educativos’, señaló el IMCO. Sin embargo, a pesar de haber transcurrido tres semanas desde el huracán, no se ha implementado una estrategia para enfrentar los estragos que esta crisis tendrá sobre la educación.

Es evidente que se necesita una acción inmediata y coordinada para salvaguardar el futuro académico de estos estudiantes. La sociedad demanda que las autoridades tomen medidas urgentes para asegurar que los efectos del huracán ‘Otis’ no sean devastadores para la educación en Guerrero. El bienestar y desarrollo de miles de niños y jóvenes está en juego, y es responsabilidad de todos garantizarles un ambiente propicio para su aprendizaje.

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