La región de la Frontera y la Sierra Madre de Chiapas sigue siendo escenario de una angustiante crisis de desapariciones, a pesar de la presencia de la Guardia Nacional. La disputa por el control del territorio entre miembros del Cártel de Sinaloa y el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) ha dejado una larga estela de violencia, ejecuciones, desapariciones forzadas y desplazamiento masivo de miles de personas.

Los casos de desapariciones se multiplican sin solución en Chiapas

Un convoy del Cártel de Sinaloa desfiló por Chamic hace más de 40 días y el Ejército, la Guardia Nacional y las fuerzas policiales estatales llegaron a la región, pero la situación no ha mejorado significativamente. Las autoridades han hecho esfuerzos, pero la gente ha reportado más de una docena de desapariciones en la región de Frontera y la Sierra Madre.

Entre los casos más alarmantes están Misael Rodríguez Méndez de 48 años y su hijo Santos Rodríguez Cifuentes de 27 años, quienes salieron juntos de su domicilio en el municipio de La Grandeza con destino al municipio de Comitán. Sin embargo, desaparecieron sin dejar rastro al pasar por Frontera Comalapa. El CJNG y una organización afín conocida como MAÍZ controlaban la zona donde los vieron por última vez.

Además, Manuel de Jesús Flores Zúñiga y su sobrino Jostin Rudibey Vázquez Morales desaparecieron también en el camino hacia Motozintla, donde planeaban vender un perrito. Sus cuerpos aparecieron después, pero se determinó que los habían ejecutado el 27 de septiembre junto con otras dos personas.

Otro caso lamentable es Ventura Enrique Guzmán Rivera de 54 años, quien salió de su casa en Barrio Reforma de Motozintla rumbo a Frontera Comalapa y nunca volvió.

En los casos más recientes, se reportó la desaparición de Yoni Isaí Ramos López, de 38 años, y Daniel Iván Ruiz Jiménez, de 19 años, ambos originarios de Ocosingo. Los vieron por última vez en Amatenango de la Frontera el pasado lunes 30 de octubre. Iban a bordo de un vehículo blanco con placas del Estado de Chiapas, mientras instalaban antenas para la recepción de señal de internet.

Estos son solo algunos ejemplos de las desapariciones que la gente ha reportado, algunas ante la Fiscalía General del Estado y otras a través de las redes sociales.

La necesidad de una respuesta efectiva y contundente

La violencia desatada por la disputa entre los cárteles ha generado una preocupante situación en la región, sin que la presencia de las fuerzas armadas haya logrado detener este flagelo. Es crucial que las autoridades continúen trabajando en conjunto con la comunidad para abordar esta crisis y garantizar la seguridad de los ciudadanos en Chiapas. Se requiere una respuesta efectiva y contundente para poner fin a esta alarmante situación de desapariciones y violencia que afecta a la población local.

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