En un hecho sin precedentes, la Cámara de Diputados de México aprobó por mayoría una reforma que busca garantizar la protección, trato digno y cuidado de los animales en todo el país. Esta medida, que contó con 450 votos a favor y ningún voto en contra, también incluye la prohibición del maltrato animal en todas sus formas.
El pasado 12 de noviembre de 2024, el Canal del Congreso informó sobre esta importante decisión, la cual reforma los artículos 3, 4 y 73 de la Constitución para establecer de manera clara que el Estado mexicano tiene la responsabilidad de velar por el bienestar de los animales y garantizar la prohibición de cualquier acto de crueldad hacia ellos.
La diputada Merilyn Gómez Pozos, del partido Morena, destacó que esta reforma no es solo un acto legislativo más, sino que representa un compromiso moral y ético con los seres vivos que comparten nuestro planeta.
Según la diputada, elevar la protección animal a nivel constitucional es un acto de justicia elemental que refleja la evolución de la sociedad mexicana en materia de derechos animales.
Sin embargo, esta reforma aún debe ser analizada y eventualmente aprobada por el Senado, así como por los Congresos locales del país.
Aunque el proceso no ha concluido, esta iniciativa marca un precedente en la lucha contra el maltrato animal en México y se espera que traiga resultados positivos en beneficio de los animales.
Esta decisión surge en un contexto en el que organizaciones y activistas han venido denunciando el alarmante número de animales abandonados en las calles de México.
Según datos del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México, se estima que el 70% de los perros y el 60% de los gatos se encuentran en situación de calle, lo que los expone a diversos peligros y sufrimientos.
El ejemplo de «Cuacolandia», un santuario de caballos ubicado en Atlixco, Puebla, es un recordatorio del compromiso de personas como Elena Larrea, quien dedicó su vida a proteger a los animales y promover leyes en favor de su bienestar en la región. Su legado y el de tantos otros activistas han sido fundamentales para que iniciativas como la aprobada por la Cámara de Diputados se conviertan en realidad.
La aprobación de esta reforma representa un paso significativo en la protección de los derechos de los animales en México. Ahora, queda en manos de las autoridades seguir adelante con este compromiso y garantizar que los animales reciban el respeto y cuidado que se merecen en nuestra sociedad.
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