Ciudad de México.- “Es legal, pero inmoral, es una imprudencia porque este señor fue director de Pemex (Petróleos Mexicanos) y está como testigo protegido”, así respondió el presidente Andrés Manuel López Obrador, luego de las fotografías que se difundieron el fin de semana de Emilio Lozoya comiendo en el restaurante lujoso Hunan de Las Lomas.

Expresó que, “es una gente que está recibiendo trato especial porque decidió dar a conocer toda la corrupción del sexenio anterior, incluso desde Calderón”.

López Obrador, afirmó que Lozoya dio a conocer cómo Odebrecht entregó dinero a cambio de contratos durante campaña.

Consideró que se trata de un testigo de actos de corrupción que dañaron a México, por lo que, también fue provocador e imprudente salir de su casa, cuando todavía tiene que rendir cuentas ante la justicia.

Además, también evidenció los sobornos que recibieron los legisladores (del bloque conservador) para aprobar la reforma energética. “Esta reforma se aprobó con sobornos y ‘moches’, entonces es una inmoralidad”, añadió.

“Ojalá que la Fiscalía informe sobre este asunto”, puntualizó Andrés Manuel, al depositar su confianza en el fiscal general, Alejandro Gertz Manero, para que se haga justicia pronta y expedita.

Pidió la Fiscalía General de la República (FGR) que haya transparencia y se aclare el caso de Odebrecht y la planta de Agronitrogenados.

Al exfuncionario no le fue interpuesta como medida cautelar el arresto domiciliario; sino la imposición de un brazalete para conocer su ubicación y firmar ante el Ministerio Público cada 15 días su libertad condicional.

“Parece que no tienen llenadora, porque amagan con regresar, nada más que ya no van a regresar”, expresó.

La FGR aún analiza si le brindará protección a través del criterio de oportunidad o lo acusa ante el juez para llevarlo a juicio.

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