En un inicio de año marcado por la brutalidad y el horror, el colectivo «Hasta Encontrarte» ha logrado desenterrar una perturbadora verdad en el estado de Guanajuato. En apenas nueve días, han localizado cuarto fosas clandestinas en distintos municipios, revelando una realidad que muchos preferirían ignorar.
El primer macabro descubrimiento se produjo el 2 de enero en la comunidad de Conejo, en la ciudad de Irapuato. Los valientes miembros del colectivo encontraron el cuerpo de una mujer, cuya identidad fue posible determinar gracias a los tatuajes que compartía en sus redes sociales.
Dos días después, el 4 de enero, una impactante escena se desplegó en la colonia Bella Vista, también en Irapuato. En el interior de una casa en aparente estado de abandono, se encontró otro cuerpo sin vida. Sin embargo, debido al avanzado estado de descomposición, no fue posible identificar señas particulares que ayuden a resolver el enigma que envuelve a esta víctima.
La macabra cuenta continúa en el municipio de León, donde el 8 de enero fue desenterrada una fosa clandestina más. En su interior, el cuerpo de un hombre vestía una combinación inusual de prendas: calcetas blancas, pantalón negro de mezclilla, ropa interior guinda y una camiseta negra de manga larga. Cada detalle, esperanzadoramente, podría convertirse en una pieza crucial para dar con la identidad de este individuo y traer justicia a su memoria.
El más reciente descubrimiento ocurrió el 9 de enero en Pénjamo. Para el colectivo «Hasta Encontrarte», este fue un hito histórico, ya que marcó el hallazgo número 193 en su incansable búsqueda.
Los números cuentan una historia sombría: según la asociación Causa en Común, Guanajuato ocupó el segundo lugar en fosas clandestinas durante los primeros nueve meses de 2023, únicamente superado por Sonora.
La Fiscalía General del Estado revela que, entre los años 2020 y 2023, se han localizado un total de 492 cuerpos en fosas clandestinas en 13 municipios del estado. Entre ellos Salvatierra, Acámbaro, Celaya, Irapuato y León. De manera alarmante, al menos 105 de ellos aún no están identificados. Lo que acentúa la necesidad de una respuesta urgente por parte de las autoridades.
El hallazgo de estas fosas clandestinas representa solo la punta del iceberg en un problema que urge abordar. Es hora de poner fin a esta escalada de violencia y garantizar que cada nombre encontrado en estas fosas sea sinónimo de justicia y verdad.